Alicia, técnica de investigación criminal de Bogotá, es quizás la mujer más respetada en su cargo.
Esa madrugada estaba pendiente un cuerpo por entregar, Medicina Legal se encontraba al tope y era necesario esperar dos horas más para realizar el procedimiento. Mientras tanto, *Alicia, técnica de investigación criminal de Bogotá, estaba sentada en una pequeña mesa redonda, transcribiendo en un libro A-Z los detalles del fin de semana anterior, o mejor, las actas de inspección técnica del cadáver.
Alicia, técnica de investigación criminal de Bogotá, es quizás la mujer más respetada en su cargo.
Alicia es de Bogotá, tiene 60 años, y es quizás la mujer más respetada en su cargo. Era abogada de la Contraloría cuando salió el concurso de la Fiscalía en 1994. “Luego fui asistente de un fiscal en la Unidad de Reacción Inmediata de Ciudad Bolívar y la de Kennedy. Siempre me atrajo la Unidad de Vida del CTI, por eso luché para que me dejaran participar en el concurso de policía judicial”.
Alicia, técnica de investigación criminal de Bogotá, es quizás la mujer más respetada en su cargo.
Ese día del 2017 las inspecciones sumaban 2060; a cada una se le asigna un código y un informe fotográfico, cuya acta debe tener el mismo número de la noticia criminal. En total, son 50 investigadores para 6 turnos.
Alicia, técnica de investigación criminal de Bogotá, es quizás la mujer más respetada en su cargo.
Inevitablemente comienzan los recuerdos. *Diego, el investigador a cargo del volante contó sobre el día en el que tuvo que analizar la escena de una niña de 10 años que había muerto. Solo tenía una camiseta puesta. Estaba descuidada, sucia. “Yo no podía creer que mientras eso pasaba y nosotros analizábamos la escena su mamá estaba con su novio viendo televisión como si nada. Qué impotencia, dijo compungido”.
Alicia, técnica de investigación criminal de Bogotá, es quizás la mujer más respetada en su cargo.
Los investigadores accedieron a una sala que parecía supervisada por un cristo colgado en la pared. En el corredor una joven consuela a su madre, mientras Alicia les dice que no pueden ver el cadáver, que es mejor que lo recuerden como era él, vivo.
Alicia, técnica de investigación criminal de Bogotá, es quizás la mujer más respetada en su cargo.
El hombre de 72 años había sido remitido de otro centro de salud. Se sabía que allí había sufrido una caída y que tenía un trauma en su cabeza, por eso el personal se negaba a firmar el acta de defunción. Alicia manipula con suavidad su cabeza, a eso le llaman 'el Champú', una forma cotidiana de explicar cómo la revisan para encontrar hematomas o marcas extrañas.
Alicia, técnica de investigación criminal de Bogotá, es quizás la mujer más respetada en su cargo.
Se le ven hematomas en su brazo derecho, lastimadas sus muñecas, de todo eso toman foto. Luego voltean el cuerpo, la espalda del hombre se ve morada, tienen que revisar el cuerpo palmo a palmo para luego meterlo en una bolsa blanca. Así, con cada detalle descrito en un informe, el hombre sin vida es llevado al necromóvil que está parqueado en el hospital. Su cuerpo es dispuesto en una especie de bolsa blanca.
Alicia, técnica de investigación criminal de Bogotá, es quizás la mujer más respetada en su cargo.
Los hombres de la necromóvil deben alistar las bandejas metálicas para transportar el cuerpo. El cuerpo del hombre va desapareciendo en el blanco de un corredor de hospital, bajo la mirada de su familia, sus lágrimas, su silencio. El cuerpo pesa, pero Alicia dice que ellos, los muertos, los escuchan y se ponen más livianos si ellos se los piden. Con la fuerza de Alicia y tres hombres más el cuerpo del anciano se guarda en el vehículo.
Alicia, técnica de investigación criminal de Bogotá, es quizás la mujer más respetada en su cargo.
Luego de realizar algunos informes el cuerpo es llevado a Medicina Legal. El hombre esperará junto a otros cadáveres a que se le realicen los estudios que determinen cuál fue la causa de su muerte. Los agentes del CTI descargan el cuerpo y se despiden del hombre. El fin de semana estuvo álgido. Hay muchos cuerpos en Medicina Legal. Con un rótulo termina la jornada del día. Comienza la investigación para saber qué fue lo que le arrebató la vida a este hombre.