La Fiscalía apelará la decisión de un juez que le otorgó detención domiciliaria a diez estudiantes que integraban una banda que comercializaba drogas sintéticas en los entornos universitarios y que fue desmantelada después de ocho meses de seguimiento e investigación de la Sijín.
La Policía los identifica como ‘los Químicos’, jóvenes entre 22 y 24 años que se dedicaban a la producción y comercialización de marihuana Wax, una cera que se fabrica a partir del extracto de la planta y se inhala con vaporizadores o cigarrillos electrónicos, y así logra pasar desapercibida, ya que no expela ningún tipo de olor.
Según Andrés Olaya, médico toxicólogo clínico de la Fundación Universitaria de Ciencias de la Salud (Fucs), esta droga tiene elevados riesgos para la salud por su alto contenido de principios canábicos que pueden llevar a la adicción de manera rápida.
El compuesto “interactúa con las neuronas, provocando efectos mucho mayores y deterioros más rápidos”, y en algunos casos, podría acelerar o desarrollar enfermedades como esquizofrenia o bipolaridad, explicó.
La denuncia de un padre preocupado por el consumo de drogas de su hijo fue clave para iniciar la investigación que implicó la inmersión de un agente encubierto que debió hacerse pasar por un cliente para recopilar información. “Muchos de esos grupos tenían personas que les compraban y sitios asignados, lo que permitió llegar a ellos”, afirmó Hoover Penilla, comandante de la Policía de Bogotá.
La estructura criminal promocionaba la droga en redes sociales y la distribuía a domicilio. Por cada dosis cobraban hasta 2.000 pesos. Se dividían sus funciones: el líder, alias Daniel,se encargaba de conseguir los insumos para la fabricación de la marihuana Wax.Los demás tenían el papel de creativos gráficos en redes sociales y eran los captadores de clientes. En 11 allanamientos, incautaron 5.000 dosis entre marihuana, cocaína y 2C-B.