La China que antes fuera reconocida como la tierra de las bicicletas, hoy es considerada el mayor mercado mundial del automóvil. Esto ha generado un déficit de aparcamientos. La cifra habla sola: mientras hay 180 millones de autos en propiedad de los chinos, faltan 50 millones de aparcamientos en las diferentes ciudades.
Lo anterior muestra consecuencias graves. Una de ellas es que los carros pasan a estacionarse en las aceras peatonales, con los riesgos que esto trae para los caminantes. Las multas relativamente baratas por esta contravención (alrededor de 30 dólares, unos 90.000 pesos) llevan a que los infractores tomen el riesgo de estacionarse en sitios prohibidos, pues se estima que para conseguir un parqueadero en los centros urbanos de ciudades como Beijing (4,4 millones de carros particulares) y Shanghái (2,1 millones) los conductores pueden demorarse hasta hora y media, en horas pico.
Para resolver tal caos, aplicaciones como Edaibo y D-Parking, que relacionan propietarios de espacios con dueños de vehículos, van en ascenso y facturando.
El informe lo reveló Rose Yu, en The Wall Street Journal.
En contraste, Nueva York apuesta por la reducción del particular y el mayor uso del transporte público.
Comentar