“Mi papá no vive con nosotros y mi mamá está trabajando en una bodega en Alfonso López”, fue la respuesta que dio una niña de 13 años, encargada de cuidar y preparar los alimentos de sus cinco hermanos, al ser rescatados por la Policía de Infancia y Adolescencia el sábado pasado cerca de la medianoche, en el barrio Cedritos Sur (localidad de Ciudad Bolívar).
Durante ocho días habían permanecido solos en una vivienda los seis niños de 2, 4, 6, 9, 11 y 13 años, que hacía solo 20 días habían llegado a la capital con su mamá, quien, según los vecinos, no estaría trabajando sino que habría salido de viaje.
La llamada, a la línea 123, del propietario de la vivienda donde permanecían los niños fue lo que permitió que agentes de policía llegaran hasta el sur de la capital y encontraran a los niños durmiendo, en varias camas dentro de una misma habitación.
Según cifras de la Policía, desde enero hasta los primeros tres días de julio, la institución ha encontrado a 58 niños y adolescentes sin ningún tipo de vigilancia o acompañamiento en sus viviendas. Diez de esos casos se han atendido durante los tres primeros días de julio.
Entre tanto, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) reportó 3.254 casos de maltrato, hasta el 25 de mayo de este año, por negligencia, como ellos lo denominan.
Veinticuatro horas después de que estos seis menores fueran trasladados a un hogar de protección del ICBF, la madre se presentó ante las autoridades competentes asegurando, como es común en la mayoría de los casos, que ella había salido a trabajar y no tenía con quién dejar a sus hijos, y que por eso se había visto obligada a dejarlos solos. El ICBF adelanta el proceso de restablecimiento de derechos, y en caso de que los casos sean repetitivos, la madre podrá perder la patria potestad de los menores.
Otros casosIrónicamente, el fin de semana del 17 de junio, mientras muchos padres celebraban su día hubo niños que permanecieron solos en casa por más de 12 horas.
Tres casos aislados tuvieron que atender las autoridades durante las noches del sábado y domingo, y uno de los que más impactó fue el del menor de 5 años que, cuando los uniformados procedían a entrar a la casa para rescatarlo, estiró su mano y con un vaso plástico pedía que le dieran algo de tomar.
“Este caso fue en el barrio Boyacá Real de Engativá. Cuando se ingresó a la residencia se pudo constatar que inicialmente le habían dejado desayuno, pero habían pasado más de 12 horas y el niño no había comido nada más”, aseguró el capitán Luis Carlos Urrego, jefe de Infancia y Adolescencia de Bogotá.
A esta situación se suma la de un par de hermanitos, una niña de 5 años a cargo de un bebé de 6 meses, que permanecieron más de 24 horas solos en la vivienda, mientras, según vecinos, sus padres entraron a la casa, sacaron dinero y siguieron celebrando.
Finalmente, dos niños de 2 y 4 años también fueron rescatados por los uniformados, después de intentar por más de media hora romper el enorme candado que tenía la puerta.
“Eso de dejar a los niños solos se va volviendo costumbre; los padres salen y, como no pasa nada, no ponen cuidado y los dejan bajo llave y con candados, sin pensar que si ocurre algún accidente, los niños no van a poder salir de la casa”, enfatizó el capitán Urrego.
De acuerdo con información del ICBF, los padres infractores se enfrentan a un proceso administrativo; además de poder perder la patria potestad de sus hijos, pueden recibir sanciones de entre 32 y 108 meses de cárcel. En promedio, 22 niños al día son abandonados por sus padres.
BOGOTÁ