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Las enfermedades que nos pueden seguir matando después del covid-19
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¿Cuáles son los retos de Bogotá en el escenario de pandemia postpandemia?
Enfermedades

AFP

Especial

Las enfermedades que nos pueden seguir matando después del covid-19

Las enfermedades del corazón, las cerebrovasculares y las crónicas de vías respiratorias preocupan. 

Desde que comenzó la pandemia en Bogotá ya han fallecido 26.537 personas a causa del covid-19 pero no hay que olvidar que hay otras enfermedades que seguirán atacado en el futuro próximo.

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Según el Registro Único de Afiliados (Ruaf) y el Registro de Estadísticas Vitales (EEVV), las principales causas de mortalidad en Bogotá entre el 1.º de enero y el 31 de octubre de 2020 fueron las enfermedades isquémicas del corazón (4.643), las cerebrovasculares (1.471) y las crónicas de vías respiratorias inferiores (1.391). Estas tres representan el 21 % de la mortalidad.

Según la Liga Colombiana contra el Infarto y la Hipertensión, esta es una enfermedad silenciosa que no presenta síntomas en la mayoría de los casos, pero que, a pesar de esta advertencia, es el factor de riesgo que más muertes causa en el mundo. “Casi 20 millones de personas mueren anualmente por estas patologías, infarto cardíaco, accidente cerebrovascular, insuficiencia cardiaca e insuficiencia renal”, explica Luis Moya Jiménez, presidente de esta liga.

Por otro lado, el Sistema de Información Territorial en Accidente Cerebrovascular (Sitac) dice que este ha sido definido por la OMS como el rápido desarrollo de signos de compromiso de la función cerebral, con síntomas de veinticuatro horas o más de duración o que llevan a la muerte. Entre 2011 y 2015, Bogotá presentó la mayor incidencia de casos de ACV atendidos en Colombia con un total de 14.266.

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Todo esto está relacionado con el estilo de vida de los ciudadanos. Por ejemplo, de acuerdo con el diagnóstico médico de obesidad reportado en los Registros Individuales de Prestación de Servicios de Salud (Rips) del Ministerio de Salud y Protección Social, en Bogotá se aprecia un incremento sostenido del 160,6 % entre 2016 y 2019 y se teme que después de la pandemia esta problemática se incremente, sobre todo por el sedentarismo.

La nutricionista de la Asociación Colombiana de Diabetes Claudia Gamboa recomienda que “todas aquellas personas que tienen obesidad eviten el consumo de azúcares industrializados”.

Sin embargo, aunque las muertes por diabetes aumentaron en un 70 % a nivel mundial entre 2000 y 2019, en Bogotá, a partir de los datos consignados en las bases de datos de mortalidad para el periodo 2000-2020, no fue posible evidenciar un incremento significativo en la mortalidad por esta causa. “De hecho, hubo una tendencia al descenso en la tasa, pasó de 15,5 decesos por 100.000 habitantes en 2000 a 11,5 en 2020.

Resaltamos que los datos son muy preliminares. El número de muertes entre hombres se mantuvo relativamente estable con alrededor de 460 casos anuales”. Ángela Jaramillo, de Asodiabetes, explica que realizar actividad física es indispensable para el buen manejo de esta enfermedad, siempre y cuando esta sea de una intensidad al menos moderada y se practique la mayoría de los días.

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Traumas

No solo las enfermedades crónicas han puesto sus números en las fatalidades de los capitalinos. Las atenciones por traumatismo en Bogotá presentan un incremento continuo de 54,9 % en el periodo 2016-2019. Comportamiento similar presentan los individuos únicos con un incremento de 56,3 % en el mismo periodo. En el 2020 hubo una mayor frecuencia de atenciones en el grupo de los hombres que en el de las mujeres.

Los diagnósticos más frecuentes corresponden a fracturas, contusiones, esguinces y heridas en cabeza, de la mano y los dedos. Según los expertos, una buena cuota de esos traumas la aportan los accidentes de tránsito. Según la Secretaría de Movilidad, en el 2019 hubo más de 400 muertes en siniestros viales. En Bogotá ocurre un siniestro vial cada 5,6 minutos. Si bien esas cifras disminuyeron por las cuarentenas, no deja de ser un indicador preocupante. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en la actualidad siete de las 10 principales causas de muerte son enfermedades no transmisibles, como los traumas.

(Lea: La historia ratifica que las crisis cambian las ciudades en lo urbano)

Drogas y alcohol

En las Américas, el consumo de drogas ha surgido como un factor importante que contribuye a la discapacidad y al número de muertes, según la OMS.

En Bogotá se registra un incremento sostenido de las atenciones por consumo de drogas del 120,9 %, en el periodo 2016-2019, y los individuos únicos mostraron un incremento de 121,5 % en el mismo periodo. El índice de concentración per cápita causada por el consumo de sustancias psicoactivas fue de 2,6 atenciones por individuo en 2016 y aumentó a 2,8 atenciones por individuo en 2019. De nuevo son los hombres quienes más consultan o llegan a las instituciones de salud por esta causa.

Échele Cabeza y la Corporación ATS realizaron un estudio entre el 31 de marzo y el 3 de abril de 2020 para entender el comportamiento de la compra y el uso de estupefacientes en la ciudad durante el confinamiento. “La encuesta nos muestra un aumento en el consumo de sustancias legales e ilegales como el café, el té, el alcohol y la marihuana para tener experiencias más individuales que sociales; observando, por el contrario, la disminución de sustancias que regularmente se consumen en espacios de fiesta y ocio en bares, clubes, conciertos y festivales, como cocaína, MDMA-éxtasis, ‘tusibi’ y 2cb-Nexus, entre otras”, explicaron.

Según información recopilada por la SDS, los diagnósticos más frecuentes de las atenciones por trastornos mentales y del comportamiento debido al consumo de sustancias psicoactivas en Bogotá durante el periodo 2016-2020 están relacionados con el uso de múltiples drogas y sustancias psicoactivas, síndrome de dependencia, intoxicación aguda debida al uso de alcohol y de tabaco, entre otros.

En cuanto al consumo de alcohol, si se analizan las primeras causas de atención debido a esta conducta entre 2016 y 2020, se aprecia un incremento de todas las consultas para los años analizados, a excepción de 2020, debido a que la información todavía es preliminar.

(De su interés: Lucha contra el crimen no será la misma después de la pandemia)

Enfermedades mentales

Durante el periodo comprendido entre el 1.º de enero y el 31 de octubre de 2020, se registraron 467 muertes correspondientes a enfermedad de Alzheimer y demencias no especificadas.

Estos casos representan el 1,3 % del total de fallecimientos consignados en la base de mortalidad del Distrito Capital, lo que las posiciona bastante lejos de los 10 primeros puestos de mortalidad en la ciudad. Sin embargo, las cifras preocupan.

Dentro del Plan de Desarrollo se encuentra la meta para la detección temprana del alzhéimer, la cual contempla acciones individuales y colectivas. Las primeras identifican de forma temprana el riesgo y las segundas trabajan más en la prevención.

(Siga leyendo el especial: Bogotá en la era poscovid)

CAROL MALAVER
SUBEDITORA BOGOTÁ
Escríbanos a carmal@eltiempo.com ​

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