Luego de la captura de los taxistas que habrían quemado un Uber y pocas horas después de conocerse un video en el que otros choferes de los amarillos hostigaban a una familia porque se movilizaban en un carro que presumían de esa plataforma, voceros del gremio se fueron lanza en ristre contra el secretario de Movilidad, Juan Pablo Bocarejo, por un estudio académico sobre Uber que el funcionario desarrolló en el 2015.
El análisis, que Bocarejo llevó a cabo cuando se desempeñaba como investigador del Grupo de Estudios en Sostenibilidad Urbana y Regional de la Universidad de los Andes, resalta los impactos positivos de Uber en Bogotá.
En el documento se afirma que dicha plataforma resulta un estímulo para evitar el uso del vehículo, ya que el 40 por ciento de los usuarios prefirieron la aplicación para movilizarse en vez de su propio carro.
Además, en el estudio se determinó que 5.000 metros cuadrados de parqueaderos se liberan en Bogotá gracias a los usuarios de Uber.
Bocarejo indicó en medios de comunicación que el documento era un ejercicio académico y que no habría conflictos de intereses porque en su actual cargo, su obligación es hacer cumplir las normas, pero no expedirlas, por lo que no podría favorecer los intereses de Uber.
Esta opinión fue respaldada por el actual director del grupo académico, Daniel Páez: “El estudio lo que hizo fue analizar una información sobre viajes y movilidad en Uber, pero en ningún momento se señala que se legalice o que se permita este servicio en la ciudad”.
Mientras que José Estalin Rojas, experto en movilidad, indicó que el análisis no inhabilitaba a Bocarejo: “El problema que genera Uber toca varias instancias: el Ministerio de Transporte, el Ministerio de Tecnologías de la Información. En ese sentido, no es exclusividad de las secretarías de Movilidad de las ciudades del país”.
Otros académicos explicaron que un análisis como el realizado por el ahora secretario no se basa en conceptos personales, sino en argumentos técnicos. “Se hacen comparativos con estándares internacionales”, aseveró Néstor Sáenz, de la Universidad Nacional.
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