Por donde se supone iba a ir el tramo norte de la Avenida Longitudinal de Occidente (ALO), sobre la reserva Thomas van der Hammen, hay ahora 95 nuevos árboles plantados por la alcaldesa Claudia López y un equipo de voluntarios.
Así quedaron las cosas después de que, el sábado, la alcaldesa hiciera un recorrido por el bosque Las Mercedes y, en el punto donde se preveía que iría la vía que desembotellaría el noroccidente, diera inicio a la restauración ecológica de la reserva.
“Acá, en un área de 27 hectáreas, el IDU había comprado predios con la intención de hacer la ALO. Hoy no solo no vamos a hacer la vía, sino que empezaremos a restaurar y reforestar. Donde iba a haber cemento, vamos a sembrar árboles. Donde iba a haber una autopista, vamos a dejar vida”, manifestó la alcaldesa, y confirmó así una de sus promesas de campaña.
Aseguró que este era el principio de la implementación del plan de manejo ambiental (acuerdo CAR 021 de 2014), proyectado para la reserva en diez años de ejecución. En el proceso estarán involucradas comunidades, colectivos y privados que deseen vincularse; y, por su parte, el Distrito analizará los mecanismos financieros y presupuestales para cumplir con las actividades.
Esta se suma a otras acciones que ya había emprendido la alcaldesa para proteger la reserva. Hace poco más de una semana, López ya había enviado una carta a la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR) para desistir de la solicitud de sustracción de terrenos que había hecho la pasada alcaldía. Esta solicitud requería terrenos para desarrollar tres proyectos: la avenida Laureano Gómez (o carrera 9.ª), la Boyacá (para conectar con la autopista Norte y la vía Chía-Cajicá-Zipaquirá) y la avenida Suba-Cota.
Hoy no solo no vamos a hacer la vía, sino que empezaremos a restaurar y reforestar. Donde iba a haber cemento, vamos a sembrar árboles
La ALO norte no entró en esa solicitud. Pero la administración Peñalosa adelantaba estudios para tramitar la solicitud de sustracción de esta y al menos otras ocho vías.
Lo que no es tan claro aún es qué alternativas habrá en términos de movilidad para descongestionar este punto de la capital. A principios de enero, la actual administración afirmó que se estudiaría la posibilidad de trazar los corredores viales de manera que no afectaran la reserva.
Por lo pronto, la alcaldesa sostuvo que sí se haría la ampliación de la vía Suba-Cota porque estaba prevista dentro del plan de manejo ambiental. Incluso planteó la posibilidad de que la extensión de la primera línea del metro hasta Suba y Engativá funcionara como opción.
Pero, retomando la actividad ambiental de este fin de semana, vale mencionar que la alcaldesa recorrió el bosque Las Mercedes y otras zonas de la reserva con la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia, y la delegada de la alcaldía ante la CAR, María Mercedes Maldonado, defensora de este espacio.
Incluso, sentada sobre un enorme árbol de 400 años y acompañada de la abuela Blanca, una líder muisca, y de dos niños, recordó su compromiso con “el nuevo contrato social intergeneracional” para proteger la vida y proyectar un crecimiento sostenible de ciudad.
No se trata solo de no construir la ALO sobre la reserva Thomas Van Der Hammen y en cambio reforestarla.
— Claudia López 👍 (@ClaudiaLopez) January 25, 2020
Se trata sobre todo se hacer un nuevo pacto ciudadano del siglo XXI, inter generacional, con el planeta y el desarrollo sostenible.#BogotaReverdece pic.twitter.com/MitDCH6bGI
BOGOTÁ