Claudia Bohórquez vive con dos de sus tres hijos. Lleva 10 años viviendo en Bogotá. Nació en el sector del Cañón del Combeima, en el departamento del Tolima, de donde salió desplazada por la violencia.
Llegó a Plaza de la Hoja luego de concursar en dos sorteos para ser la beneficiaria de una vivienda otorgada por el Distrito. Desde el 2007 estaba registrada y pendiente de las llamadas de los responsables, pero fue solo hasta el 2014 cuando fue notificada de que había sido elegida y que por fin recibiría su vivienda.
“Para decirnos que habíamos pasado y que tendríamos nuestra casa nos llamaban por el número de la cédula. Había gente que levantaba la mano y ya; en cambio otros gritábamos, llorábamos y estábamos realmente contentos”, menciona.
Allí hace parte de un proyecto de agricultura urbana liderado solo por mujeres. “Pensamos que esto es lo que Plaza de la Hoja le puede ofrecer a Bogotá”, menciona.
“Deseo que Plaza de la Hoja no sea solo problemas de convivencia, de robos, de drogas, de mujeres que hemos sido maltratadas, sino que sea algo mejor”, comenta.
Salió desplazada con su familia, exactamente, el 1.° de julio del 2006. Bastaron seis meses para que la vida de Claudia y la de su familia cambiaran por completo. Todo empezó cuando, en enero de ese mismo año, grupos de la guerrilla de las Farc llegaron a esa zona del Tolima, invadiendo casas y terrenos. “Se vivía una tristeza horrible y una intranquilidad con la que no sabíamos qué hacer”.
Luego de ser testigo, según cuenta ella, de cómo le dispararon a uno de sus vecinos, tomó la decisión de abandonar este lugar y dirigirse a Ibagué, un jueves a las 6:30 p. m., con su familia, tres mudas de ropa y algunas gallinas.
Luego de un tiempo considerable en la capital del Tolima tomó la decisión de viajar hacia la capital del país junto a sus hijos y esposo un sábado en la tarde dejando a su familia en la capital tolimense “Éramos 6 personas en una pieza en la casa de un tío”.
Decidió separarse de su marido por maltrato.No ha vuelto a la finca donde creció, no le gusta. Dice que desde hace unos 8 años los grupos armados no se volvieron a aparecer.
ANA GONZÁLEZ COMBARIZA
Twitter: @Combariiza
ELTIEMPO.COM