Desde el mediodía, más de un centenar de ciclistas se darán cita en la avenida Jiménez con carrera Séptima, un emblemático punto de la capital, para rendirle un homenaje a Bogotá y para conmemorar lo que llaman ‘el Día del cachaco’.
Así lo han hecho desde el 2011, cuando surgió la iniciativa, de la mano de cinco organizadores, quienes han liderado el Ciclopaseo Cachaco, y que han motivado a los bogotanos para que se unan a esta iniciativa, el tercer sábado de agosto, durante 6 años.
Los asistentes van vestidos de bogotanos de los años 30 y 40. Corbatines, boinas y sombreros, tirantas, ruanas, vestidos de terciopelo, zapatos de charol, entre otros, son algunas de las prendas que usan los biciusuarios este día.
Según comentó Ivonne Leguizamón, una de las líderes de esta iniciativa ciudadana, con la jornada “queremos rescatar los valores que tenían los cachacos; esa apropiación de la ciudad y el respeto por los demás. Los cachacos no somos solo los que nacimos en Bogotá, sino los que vivimos aquí y nos apropiamos de la ciudad, y qué mejor herramienta para hacerlo que la bici”, explicó la mujer, que ha sido toda su vida biciusuaria.
Este evento ha tenido gran acogida entre los capitalinos, tanto así que la edición pasada contó con la asistencia de cerca de dos mil usuarios de ciclas.
“Cuando arrancamos, en el 2011, pensamos que era una locura. Usamos las redes sociales y publicamos nuestra intención. A la primera jornada llegaron 250 personas, a la avenida Jiménez con 7.ª, que lo elegimos por ser un lugar emblemático. El siguiente año ya llegaron 800, luego 1.200 y para el 2014 ya nos acompañaron 1.500”, explicó Otto Serrath, otro de los líderes de la iniciativa ciudadana.
Cabe señalar que cada año los organizadores cambian la ruta del evento. “Visitamos lugares patrimoniales de Bogotá. El recorrido que hacemos dura entre 5 y 6 horas, porque es un desfile de trajes y de bicicletas por la ciudad. Al final siempre cerramos con un evento cultural”, explicó Ivonne.
Para Otto Serrath, esta iniciativa es importante “para entender que el cachaco no es el elitista, sino es el que vive y disfruta la ciudad. En Bogotá, el 30 por ciento de habitantes son de la ciudad, el 70 por ciento restante es de afuera, por eso debemos apropiarnos de ella”, señaló.
Saludar, ser amable con los ciudadanos y los peatones y expresar el amor por Bogotá son esenciales en esta edición del Ciclopaseo Cachaco.
Para tener en cuentaNo es una carrera: el ciclopaseo es un evento familiar, por lo tanto, se recomienda ir despacio. Es una puesta en escena: no se realizan cierres de vías, ya que la misma gente de los vehículos ceden el paso para ver pasar a los ciclistas con sus trajes.
Revise su bici: compruebe que su caballito de acero se encuentre en óptimas condiciones para rodar por la ciudad, que su sillín sea cómodo, entre otros.
Kit para despinchar: en la medida de lo posible se recomienda llevar sus propias herramientas, en caso de que las llantas se desinflen.
Hidratación: es importante que lleve agua o algún otro líquido para refrescarse, pues el recorrido dura
entre 5 y 6 horas.
Documentos: porte los esenciales, como la cédula y su servicio médico, ya que puede presentarse alguna novedad de salud.
Actitud: vaya con la mejor disposición para que disfrute el recorrido. La amabilidad es clave, así como saludar mucho. También se pide respetar el paso de los peatones.
No importa el tipo de bici: cualquier cicla es admitida en el recorrido.
Vestuario: si no tiene la pinta cachaca, póngase un sombrero o un corbatín y únase al grupo.
Si quiere que trabajemos algún tema de bicicletas, escríbanos a miccru@eltiempo.com
BOGOTÁ