Lo que alguna vez fue una señal de tránsito en la avenida Primero de Mayo, justo antes del puente de la carrera 68, hoy solo es un poste metálico oxidado repleto de rayones y calcomanías que no les informa nada a los conductores y peatones que pasan por ahí.
A esto se ven enfrentados 62 miembros del Instituto Distrital para la Protección de la Niñez y la Juventud (Idiprón), quienes le hacen mantenimiento rutinario a las señales de tránsito de Bogotá.
Precisamente, el concejal Rolando González denunció que en Bogotá 26.000 dispositivos de señalización tienen algún tipo de deterioro.
Según las cifras que entregó, las localidades con más señales en mal estado son Engativá (3.307), Usaquén (2.968), Suba (2.685), Chapinero (2.680), Puente Aranda (2.218) y Kennedy (2.148).
La Secretaría Distrital de Movilidad (SDM) afirma que en Bogotá hay 249.500, de las cuales 7.864 han sido instaladas entre enero del 2017 y marzo del 2018. Además, este año se tiene prevista una inversión de 32.800 millones de pesos para la implementación de más dispositivos.
La Secretaría de Movilidad aseguró que la cifra de deterioradas solo corresponde al 10 por ciento de las que están instaladas en la capital y agregó que “los daños en las señales son atendidos mediante reposición o mantenimiento rutinario y preventivo para mejorar las condiciones de funcionalidad”.
El deterioro, según el Distrito, es por diferentes causas: daños por terceros, condiciones atmosféricas, vandalismo y accidentalidad vial.
Sobre los rayones y calcomanías la entidad dijo que “acaba con la vida útil de las señales prematuramente y es ocasionado de forma intencional”.
Para el experto en movilidad de la Universidad Nacional, José Stalin Rojas, “el vandalismo muchas veces es causal de la accidentalidad vial”.
La Secretaría de Movilidad reemplaza las señales de tránsito cuando están defectuosas o ya no cumplen el objetivo para el cual fueron instaladas. Entre junio del 2016 y marzo de este año, ha hecho el mantenimiento rutinario a 121.683 dispositivos verticales de tránsito. Este año espera que esta cifra llegue a 95.000.
Gracias al acuerdo entre el Idiprón y la Secretaría de Movilidad, los jóvenes, repartidos en seis cuadrillas, limpian rutinariamente los dispositivos. “Son 62 personas que fueron habitantes de calle o estuvieron a punto de habitarla; ellas son las encargadas de la limpieza, pintura y, en algunos casos, enderezar las señales torcidas”, dijo María Fernanda Espitia, coordinadora del convenio del Idiprón con la SDM.
Los lugares en los que trabajan estos jóvenes se los designa la Secretaría de Movilidad luego de revisar las zonas que tienen señales en mal estado.
El proceso comienza con un juagado con jabón y desengrasante para quitarle el esmog a la señal, luego se procede a retirarle las calcomanías. “Para esto usamos un disolvente suave como la gasolina, pues el tíner es más abrasivo y puede dañar la señal”, aseguraron en el Idiprón.
Posterior a esto, si es el caso, la señal se endereza y por último se pinta solo el pedestal. Generalmente, este proceso lo hacen dos personas y tardan entre 15 y 20 minutos, dependiendo de la cantidad de rayones y calcomanías que tenga la señal.Estas personas, que trabajan unas ocho horas diarias, limpian entre 100 y 120 señales por jornada.
Rafael Jaller Santamaría
Redacción El Tiempo Zona
En Twitter: @rafajaller
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