La escena cultural de Bogotá saldrá del centro y comenzará a tocar más de cerca las localidades. Al menos así lo planea Catalina Valencia, la nueva directora del Instituto Distrital de las Artes (Idartes).
“Existen muchas prácticas culturales y artísticas que no reconocemos en el territorio. La idea en este cuatrienio es visibilizarlas y volver el arte algo cotidiano en la ciudad”, menciona Valencia, quien es coreógrafa y magíster en Gestión Cultural de la Universidad de Buenos Aires.
En diálogo con EL TIEMPO, se refirió a sus principales apuestas en materia cultural, de manejo de escenarios y de trabajo con comunidades.
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¿Por qué voltear la mirada hacia las localidades?
Porque sabemos que hay prácticas que buscan transformar los territorios y porque queremos descentralizar la oferta artística, sacarla del centro histórico, y que la gente no tenga que desplazarse hasta allí. Antes de llegar a la alcaldía hice con la alcaldesa un equipo programático de arte, cultura y patrimonio. Eso me permitió comprender que en la cotidianidad hay muchas prácticas artísticas como Ojo al Sancocho, en Ciudad Bolívar, un colectivo de cine que logró hacer una cinemateca. Ese tipo de iniciativas son cosas que la gente no conoce y son un activador de diálogo cultural.
¿Pensará en nuevos escenarios más allá del centro de la ciudad?
Acá tenemos una concentración de escenarios culturales en el centro y en tres localidades. La idea es hacer uno nuevo donde no llegue la oferta cultural. Estamos definiendo si es en Bosa o en Engativá. Mientras tanto, la idea es conectar los escenarios con las prácticas territoriales. Así se hace con el teatro El Ensueño en Ciudad Bolívar: llevar una gran infraestructura a una localidad y conectar los espectáculos internacionales e impulsar los locales. Y tenemos otro desafío: el teatro San Jorge.
¿Rescatar el teatro abandonado?
Exacto, es un teatro que se recuperó en el 2014, pero está cerrado, y nuestra apuesta es ponerlo a funcionar. El año pasado se hicieron unos temas de cubierta y estamos en todas esas complejidades porque es un bien patrimonial. Lo haremos de la mano del Instituto de Patrimonio.
Hablando de escenarios, ¿qué planes hay para la nueva Cinemateca y la Galería Santa Fe?
Es la gran apuesta en el centro. Hay una oportunidad de alianzas público-privadas para potenciar nuevos públicos. Este año, por ejemplo, tendremos programaciones con embajadas para impulsar el diálogo internacional. La idea es también poder contar las coyunturas y la vida cultural y social de Bogotá. Además tenemos la cinemateca rodante, que es la oportunidad de llevar el cine a los barrios.
Con Galería Santa Fe, la que quedará bajo la plaza de mercado La Concordia, buscamos hacer un circuito cultural de la noche bogotana para que active esa galería. La idea es potenciar la noche y el trabajo en la noche en corredores como La Candelaria.
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¿Alguna sorpresa con los festivales al Parque?
Este año, la gran apuesta es los 25 años de Jazz al Parque. Por su parte, Rock al Parque es un festival que ya está en auge y tiene la mejor convivencia de todos los festivales. Y, además, queremos que Colombia al Parque se convierta cada vez más en un espacio para las familias.

Jazz al Parque
Juan Santacruz / Idartes
¿Habrá algún plan especial de seguridad y convivencia para Hip Hop al Parque? Desafortunadamente, hechos de vandalismo opacan el esfuerzo del sector cultura...
Es un festival con temas muy específicos de orden público. Por eso hay que tener una articulación, y muy potente, con la Secretaría de Gobierno y con la Secretaría de Salud. A la de Gobierno, por ejemplo, ya la convocamos esta semana para analizar el asunto. La idea este año es empezar desde ya unos meses de diálogo y visibilizar a todos los artistas que hacen parte de esto.
Nos mencionaron que uno de sus ejes es la llave arte-medioambiente, ¿cómo funciona eso?
El arte no puede estar aparte de uno de los temas centrales la agenda de la alcaldía. Por eso, vemos el arte y la cultura ciudadana como un medio virtuoso para transformar comportamientos frente al medioambiente. Una acción concreta será reducir el impacto ambiental de los festivales al Parque.
También pone sobre la mesa la dupla mujeres-cambio social...
Queremos que las artistas puedan visibilizarse más y en todos los ámbitos. En los festivales aumentaremos su participación, en los proyectos mostraremos más su labor y tendremos algo de programación especial.
¿Algo que estemos dejando por fuera?
Idartes tiene uno de los proyectos más alucinantes que yo haya visto: combinar las artes con ciencia y tecnología. Hace parte de la agenda contemporánea, que es todo el tema de tecnologías en función de las artes. Esto tiene varios proyectos, como Plataforma Bogotá y CK:\Web. La idea es sacar las artes de su relato canónico. Y hacer un diálogo de las artes con diferentes disciplinas. Ya está sucediendo con las artes electrónicas.
En su hoja de vida figuran procesos de memoria histórica a través del arte, ¿los integrará a su dirección?
La reconciliación y la memoria marcarán parte de la agenda. Tenemos espacios muy virtuosos para hacerlo y artistas que ya están hablando de eso.
ANA PUENTES
Redacción Bogotá