Internos del pabellón 2 en la cárcel La Picota, denuncian que han sufrido afectaciones de salud por cuenta de una bacteria que habrían ingerido en la comida. Una de las victimas comenzó a notar deficiencias en una de sus piernas.
Pese a que avisó a la cárcel de las dolencias sufridas, le indicaron que debía contar con un permiso para poder ir a un centro médico y ser examinado. Los familiares denunciaron que por negligencia le tuvieron que amputar una pierna.
Otra de las víctimas interpuso un derecho de petición en 2017 cuando también comenzó a sentir las mismas molestias en una de sus piernas. Actualmente le han hecho cuatro cirugías y la bacteria ya se encuentra en su rostro.
Relatan que las condiciones de salubridad no son las indicadas dentro del centro penitenciario. El INPEC declaró que ya hay equipo profesional de epidemiología que está realizando las investigaciones pertinentes en el pabellón.
Comentar