Cristian López trabaja desde hace un año y seis meses en la funeraria Inversiones y Planes de la Paz, que funciona en la avenida Usme n.º 79-18.
No es la primera vez que este lugar resulta damnificado por los actos vandálicos de quienes dicen liderar las protestas en esa zona de Bogotá. “Ayer, otra vez, en horas de la tarde nos rompieron los vidrios, dejando el local totalmente desprotegido”.
Los vándalos ingresaron por las ventanas para robar los ataúdes.
Foto:
Héctor Fabio Zamora
Debido a esta situación, los vándalos pudieron ingresar con tranquilidad en horas de la noche, cuando las protestas estaban más calientes. “Entraron por la ventana y se llevaron los ataúdes para usarlos como escudo en sus manifestaciones y protegerse del Esmad”.
Se llevaron dos cofres que eran utilizados como exhibición y que están avaluados en seis millones de pesos. Los dueños de lugar dicen no tener conocimiento del por qué algunos fueron hallados con algo parecido a rastros de sangre.
Además de llevarse estos ataúdes, los vándalos saquearon la funeraria y se llevaron un computador. “Hasta el momento no nos han llamado las autoridades a colaborarnos en el caso e identificar a los agresores”.
Este hombre dice que si las protestas no son pacíficas, los negocios del sector van a seguir sufriendo graves pérdidas.
Pero la funeraria no fue la única afectada. En todo el sector quitaron adoquines, rompieron calles, dañaron los semáforos. El barrio se ve como un campo de guerra.
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