Suspensión de clases presenciales, pico y cédula, toque de queda, ley seca, monitoreo de enfermos y hospitales de campaña son algunas medidas con las que el Distrito enfrentará esta semana crítica que comenzó con una ocupación del 91 % de camas de UCI covid-19, es decir que de las 1.997 camas dispuestas para estos enfermos hay 1.818 ocupadas.
La primera norma que anunció fue la suspensión del retorno gradual a la presencialidad en jardines, colegios y universidades públicos y privadas hasta el 9 de mayo.
Esta decisión llega cuando el 93 % de los planteles oficiales ya estaban habilitados para reapertura y el 97 % ya había radicado información sobre protocolos de bioseguridad.
En total, ya había 178 colegios oficiales que estaban realizando actividades académicas de manera presencial. La medida fue clara: Las clases en salones quedan suspendidas y deben desarrollarse de manera remota.
También se decreta la ley seca todos los días hasta el 9 de mayo, solo se permite venta a domicilio y se mantiene toque de queda a partir de las 8 p. m., pero todos los establecimientos, tanto de comercio esencial como no esencial, deberán cerrar a las 7 de la noche para poder cumplir el toque de queda a partir de la hora estipulada.
Seguirá operando el modelo 4 × 3, que viene rigiendo en la ciudad, con cuarentena general desde el jueves 29 de abril, a medianoche, hasta el lunes 3 de mayo, a las 4 de la mañana.
De la misma forma, se mantiene el pico y cédula. Mientras dure esta medida, el ingreso a establecimientos abiertos al público para realizar actividades tales como la adquisición y pago de bienes y servicios, compra de cualquier producto al detal y al por mayor, servicios bancarios, financieros y notariales y atención al ciudadano en entidades públicas se regirán por esta medida.Lea también: Coronavirus en Colombia: 465 muertes y 17.190 casos nuevos
En los días impares podrán acceder a estos servicios y establecimientos las personas cuya cédula o documento de identidad termina en dígito par y en los días pares podrán acceder a estos servicios y establecimientos las personas cuya cédula o documento de identidad termina en dígito impar.
“Tenemos el mayor nivel de transmisión y tenemos capacidad hospitalaria muy limitada. Todas las localidades están en alerta naranja, y otras como Usme, Tunjuelito, Engativá y Rafael Uribe están en alerta roja”, explicó la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, quien reiteró que “en promedio, están llegando 225 solicitudes diarias de UCI covid-19 y 150 solicitudes de UCI no covid-19”.
Por último, se refirió a las manifestaciones convocadas para los próximos días. “Las marchas o aglomeraciones son en este momento un atentado a la vida”, dijo mostrando un panorama crudo de lo que vivirá la ciudad esta semana.
La alcaldesa Claudia López afirmó que entramos en el momento más crítico y más difícil de la pandemia, y, según los modelos epidemiológicos, aún faltarían dos semanas para llegar al punto más alto del actual tercer pico.
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Como antesala de estas medidas, el Distrito adelantó el comité epidemiológico para este domingo e hizo un recorrido por algunos hospitales públicos para ver de primera mano qué medidas se pueden reforzar estos días.
La alcaldesa mayor de Bogotá, Claudia López, y el secretario de Salud, Alejandro Gómez, visitaron el hospital de Kennedy. Tenían que revisar de manera detallada la capacidad hospitalaria de este centro médico y, en general, de la ciudad en este tercer pico que parece entrar a su etapa más crítica.
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El Distrito anunció tres medidas de impacto para evitar que el sistema de salud colapse: expansión de hospitales de campaña en los espacios médicos más grandes, disponer de instrumentos de ventilación como oxígeno corriente, cánulas de alto flujo y ventilación mecánica en urgencias y tele-UCI, un sistema de monitoreo para que especialistas intensivistas puedan apoyar a los médicos de otras UCI. “Son tres medidas adicionales que estamos tomando en este momento en el que nuestra ciudad está pasando por esta tercera ola tan crítica en Bogotá”.
La ampliación de hospitales de campaña se está ejecutando en las instituciones de salud más grandes de la ciudad. La idea es ayudar a su descongestión y lograr un mejor trato para los pacientes que arriban al lugar y requieren un servicio de urgencias. La ciudad tiene cinco de estas infraestructuras, ubicadas en los hospitales Simón Bolívar, Engativá, Suba y El Tunal, y 13 unidades habitacionales en los hospitales de San José, Centro Policlínico del Olaya, San Rafael, Hospital Universitario Nacional, Virrey Solís, El Tunal y Kennedy, en los que se atienden patologías diferentes a covid-19.
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El secretario de Salud, Alejandro Gómez, dijo que a fin de prepararse para lo que puede pasar esta semana y garantizar la atención de los pacientes en Bogotá hay 2.521 camas de cuidados intensivos generales, de las cuales 1.986 están destinadas exclusivamente para pacientes de covid-19.
Agregó que tanto la red pública como la privada han incrementado sus esfuerzos para habilitar 525 camas de UCI para personas con covid-19 y 190 para otras enfermedades.
A la luz de los hechos ocurridos durante este fin de semana, entre los que están las fiestas y discotecas clandestinas y algunas aglomeraciones, el Distrito le hace un nuevo llamado a la ciudadanía para que esta semana asuma la crisis y su buen comportamiento sea protagonista.
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Según la Secretaría de Seguridad, del 23 al 25 de abril, en trabajo conjunto con las alcaldías locales y la Policía, se encontraron 47 fiestas de gran escala, dos de ellas de más de 100 personas; 86 fiestas en espacios residenciales, casas o apartamentos; 522 aglomeraciones en espacio público, especialmente en parques, con consumo de licor, y solo este fin de semana se impusieron 3.262 órdenes de comprendo por el Código de Convivencia, que se suman a los 35.513 que se han aplicado en lo corrido de 2021.
Con este panorama, el Distrito no tiene otra opción que intensificar las medidas de bioseguridad durante las siguientes dos semanas, con el fin de reducir las cifras de infección con coronavirus. “Las medidas de uso de tapabocas, cumplimiento de cuarentena estricta y no reunirnos nos ayudan a enfrentar este pico”, dijo la alcaldesa Claudia López.
“Las medidas de uso de tapabocas, cumplimiento de cuarentena estricta y no reunirnos nos ayudan a enfrentar este pico”
Otra tema en el que se avanza es el de la estrategia MegaPrass (DAR), a través del cual se han realizado en los últimos siete días, en promedio, 19.992 pruebas diarias para la detección del covid-19.
Según el Distrito, esta cifra se ha logrado gracias a la realización de pruebas en TransMilenio, parques y a domicilio, por parte de las EPS y las subredes.
Tele-Uci es un sistema de monitoreo que busca un mejor manejo médico especializado de los pacientes que se encuentran hospitalizados en las UCI.
La Subred Sur Occidente puso en funcionamiento una central de monitoreo o tele-UCI, un centro que interconecta, en tiempo real, las cinco UCI que tiene el Hospital Occidente de Kennedy, 3 del Hospital Fontibón y 1 del Hospital de Bosa.
Giovanni Rodríguez, jefe de Anestesiología del Hospital de Kennedy, aseguró que se busca “brindar apoyo y hacer cubrimiento con atención a las expansiones de UCI. Yo, desde aquí, puedo observar los signos vitales, la condición del paciente y asesorar a los médicos para actuar conforme a las condiciones en esta pandemia”.
La nueva central de monitoreo tuvo una inversión aproximada de 335 millones de pesos, y permite que un completo equipo de expertos y profesionales especializados en el cuidado crítico monitoreen a los pacientes con difícil diagnóstico médico, facilitando la toma de decisiones y buscando una eficiente evolución del estado de salud de los pacientes más graves de las UCI, que en su mayoría están internados por covid-19.
REDACCIÓN BOGOTÁ
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