Gal Gadot estaba a punto de tirar la toalla en su intento por hacer que su carrera en Hollywood despegara cuando, a finales de 2013, Warner le dio al director y productor Zack Snyder el visto bueno para que ella encarnara a la Mujer Maravilla en la película Batman vs. Supermán: el origen de la justicia (2016). La actriz israelí se sentía “enferma” de ir a castings para papeles que, finalmente, les otorgaban a otras personas. Había participado en la saga Rápidos y Furiosos en el papel de Gisele Yashar –personaje secundario de Fast & Furious (2009), Fast Five (2011) y Fast & Furious 6 (2013)–, pero sentía que su carrera estaba estancada. De hecho, casi deja de actuar.
Ser el centro de atención siempre ha sido parte de la personalidad de esta actriz, que hoy, a sus 32 años, está en la cima de la fama tras protagonizar la primera película en solitario de Diana Prince, mejor conocida como la Mujer Maravilla. “Gal siempre tuvo esa necesidad de entretener e iluminar los sitios a los que va”, dice su madre Irit, quien algunas veces acompaña a su hija en varias ocasiones a los sets de grabación y los estudios cinematográficos. Ella recuerda que una vez, cuando Gal tenía cinco años, subió en medio de la noche a la terraza de su casa, donde toda su familia estaba celebrando. Como nadie notó su presencia, tomó una manguera y roció a toda la gente con agua mientras gritaba “¡Mírenme, soy yo, estoy aquí!”.
Parecía que Gal Gadot estaba destinada a hacer parte del mundo del espectáculo: aunque empezó a estudiar derecho, apenas cumplió 18 años decidió competir en un concurso de belleza y fue nombrada señorita Israel; a los 19 años representó a su país en el concurso de Miss Universo en Quito, Ecuador, y un año después tuvo que ingresar al servicio militar, como todos los israelíes: “Son dos años en los que tienes que dar algo por tu país y aprendes disciplina y respeto”, dice la artista. “Estar en la fuerza de defensa israelí fue una gran experiencia porque aprendí bases fundamentales de combate; me hubiera costado mucho adaptar mi cuerpo a ciertos movimientos si no hubiera pasado por esa presión. Uno muchas veces piensa que ciertos momentos de la vida pueden ser totalmente inútiles, cuando en realidad son lecciones que pueden abrirte puertas inmensas en el futuro”.
Las puertas se fueron abriendo: un director de casting de Los Ángeles vio su tarjeta de modelo en la pared de su agencia y la llamó para que fuera a una audiencia para ser Camille Montes, la “chica Bond” de Quantum of Solace. Aunque Olga Kurylenko consiguió el papel, Gadot dejó impresionados a los agentes y consiguió un lugar en la saga The Fast and the Furious. Durante las grabaciones, ella realizaba todas sus acrobacias sin la necesidad de dobles, lo que le permitía demostrar no solo su atractivo, sino también su destreza física.
Sin embargo, Gal Gadot estaba cansada del constante rechazo por parte de los agentes de castings. Gadot recuerda que una o dos veces al año ella viajaba a Estados Unidos con su marido, Yaron Versano –un empresario inmobiliario de 39 años de edad–, para asistir a castings, pero casi nunca la elegían. “El rechazo es la parte más difícil de tratar de ser un actor aquí en Hollywood”, dice ella. En una ocasión, tres días antes de regresar a Tel Aviv, su agente le dijo que el director Zack Snyder le había pedido una audición, pero que ni siquiera sabía de qué personaje se trataba. Después de decenas de pruebas en pantalla, le dijeron que iba a aparecer junto a Henry Cavill y Ben Affleck en Batman vs. Supermán, interpretando a Diane Prince, la Mujer Maravilla. La película, estrenada en 2016, fue una decepción desde el punto de vista de la crítica. Si hubo algo que se rescató por unanimidad fue la interpretación de Gal Gadot: era la primera vez que la Mujer Maravilla aparecía en las pantallas tras la serie de televisión de los años setenta, cuando la actriz Lynda Carter inmortalizó al personaje de DC Comics.

Gal Gadot en su papel de la Mujer Maravilla.
Cortesía de Warner Bros. Entertainment.
La elección de Gal Gadot para interpretar a Diane Prince fue una sorpresa. Patty Jenkins, directora de La Mujer Maravilla, admite que en un primer momento no compartió esta decisión: “Cuando supe que Zack Snyder y Warner la habían escogido, me desanimé un poco; llevaba años tratando de que se hiciera esta película, pero tenía una idea diferente de la actriz que iba a tener la responsabilidad de interpretarla. Evidentemente estaba muy equivocada; yo tenía en mi mente la imagen de una mujer más ‘americanizada’ y no un rostro internacional, como el de Gadot”, dijo. “Pero ella es mucho más que eso: todos los valores que están en torno del significado de la Mujer Maravilla se ven en ella de manera natural y honesta. ¡Vaya si los chicos la encontraron! Es simplemente la mejor Mujer Maravilla que pudiéramos haber visto, ella lleva su espíritu natural”.
Gadot ya lleva un año en la cima de la fama. Esta conversación comienza en la Convención de Cómics de San Diego, en 2016, cuando recién se había estrenado Batman vs. Supermán: el origen de la justicia y continúa durante la premier de Keep up with the Joneses. Finalmente, BOCAS habló con Gadot en junio de este año en los estudios de Warner en Culver City, California, justo antes del estreno de La Mujer Maravilla.
La película que dirigió Jenkins logró 794.000 millones de dólares en taquilla. Gadot, por su parte, no defraudó en su representación de la superheroína del lazo dorado que es francamente magnética.
Desde hace un tiempo usted dejó de vivir tiempo completo en Tel Aviv para seguir su agenda de trabajo en Hollywood. ¿Cómo se ha ido ajustando a esta nueva vida?
En realidad he podido hacer esto gracias a mi esposo y siento que tengo mucha suerte por eso. Para ser honesta con usted, todo el tiempo la gente le pregunta a mi marido: “¿Cómo es que usted no está celoso? ¡Ella está besando a otros hombres en pantalla!”. Él les dice: “Ya sabes, no se trata de otros hombres, sé que es su trabajo y no soy celoso porque ella no me hace sentir celoso; sé que soy su primera prioridad y nuestras hijas son nuestra primera prioridad”. Mi familia es lo primero en nuestras vidas. Sabíamos que este último año iba a ser diferente porque yo iba a estar trabajando mucho. ¡Ha sido el año más ocupado que he tenido! Sabíamos eso, esperábamos eso y vinimos preparados y listos. Ahora empezamos a trabajar juntos.
¿En qué clase de proyectos?
Mi marido es brillante, él es un hombre que sabe cómo hacer negocios. Estamos desarrollando algunos proyectos juntos, tanto en sus negocios como en el campo de narrar historias, algunas que tienen que ver con el Holocausto y otras con historias de vida de mujeres muy especiales. En fin, pensamos que somos como una familia gitana y que por eso viajamos todo el tiempo: yo no podía esperar que alguien que ha sido una persona tan exitosa, un hombre de negocios como mi marido, lo dejara todo para venir conmigo a Hollywood. Logramos unirnos y encontramos nuestro camino.
¿Y por fuera de la industria del entretenimiento?
Cuando estuve rodando Fast & Furious mi marido, Yaron, y yo empezamos a viajar bastante entre Israel y Estados Unidos. Nos la pasábamos alojados en hoteles todo el tiempo, pero queríamos sentirnos como en casa. Fue difícil, hasta que descubrimos unos apartamentos dentro de un hotel en Los Ángeles: esa fue la inspiración para el hotel de Yaron, The Varsano. Lo bueno de nuestro matrimonio es que tenemos un grado de entendimiento y de comunicación muy grande, en el que nos ayudamos constantemente el uno al otro. Eso ha sido esencial para los dos, que somos personas muy involucradas con nuestros respectivos trabajos.
¿Cómo es un día normal en su vida?
Tratamos de mantener una vida muy normal en familia. Cuando no trabajo, llevo a mi hija a la escuela. A mí me encanta cocinar: en Tel Aviv tenemos una hermosa casa y un hermoso jardín con naranjos, olivos y todo tipo de hierbas diferentes, con las que hago ensaladas. Conozco muy bien a mis vecinos, somos amigos de la mayoría de ellos y vivo en un barrio donde realmente puedes vivir el barrio: estamos a cinco minutos del océano, hay muchos cafés, puedes salir a caminar todo el tiempo…
No podemos hablar de dar fuerza e igualdad total a las mujeres sin educar a los hombres también. No es algo unilateral, necesitamos que ambas partes estén en esto juntos.
A pesar de que su carrera ha sido relativamente breve, su paso por Hollywood ha tenido un ritmo arrollador. ¿Cómo asume la fama?
A la fama no le estoy prestando atención, es solo un efecto secundario. Como en Israel ya he sido una figura reconocida desde hace años, estoy acostumbrada a lo que está pasando aquí con los paparazzi, así que es solo ruido blanco. Lo único bueno de todo esto es que ahora no tengo que pelear y pasar por castings agotadores: ahora tengo el guion, si me gusta lo hago y si no me gusta, doy las gracias y lo dejo pasar. Esto es algo increíble para mí, hasta me siento mal cuando un agente me envía guiones y considero que no quiero hacer algo porque creo que no va conmigo. Pero eso es lo único, me siento muy agradecida por todo lo que estoy pasando.
¿Cómo ha tomado su esposo esa fama tan repentina?
De la mejor manera que pudiera hacerlo un compañero de vida. Él siempre ha estado conmigo en los buenos y malos momentos de este oficio, es mi fan, mi seguidor más grande. ¡Lo único que cambió es que empezó a entrenar más porque yo me he vuelto muy fuerte! [risas].
¿Qué tan involucrada está con el ámbito político?
¡Oh!, ¿ahora estamos entrando en la política? Bueno… Afortunadamente no soy una mujer que le guste la política, eso se lo dejo a los políticos. Tengo un montón de opiniones sobre lo que ocurre en los Estados Unidos, siento que estamos en una era muy interesante porque hay mucha gente que solo quiere tener un cambio, que solo quiere lograr cosas diferentes. Pero, para ser honesta, trato de entregar un pequeño gesto de bien al mundo al no vincularme en ese aspecto. Solo trato de ser buena con los demás y trato de ayudar y hacer lo que pueda, sin meterme en ideologías de ningún bando.
¿Qué tan patriota es usted?
Amo a mi país, de verdad, así como amo a la gente. Me encantaría que todas las personas vivieran juntas en paz. Cuando mis padres fueron al ejército, ellos esperaban que la siguiente generación no tuviera que ir, pensaban que ya tendríamos paz. Hoy en día siento y pienso lo mismo que pensaron mis padres y sé que al final del día la mayoría de la gente quiere vivir en paz y en convivencia. Todos somos iguales y todos tenemos los mismos sueños. Todos queremos que nuestros hijos tengan la mejor educación, queremos estar sanos y tener una buena vida. Eso es lo que les deseo a todos en Israel y en el mundo entero.

La actriz israelí Gal Gadot.
Rune Hellestad - Corbis / Via Getty Images
¿Qué cree que hace de la Mujer Maravilla una heroína tan feminista?
En primer lugar, con ella no se ve una diferencia de género abismal. Eso ni siquiera es un problema. Ella viene de un mundo donde los hombres y las mujeres son iguales y donde no hay inequidades. Ella ve y siente que puede hacer lo mismo que cualquier hombre. Ella es una buscadora de paz, no busca comenzar batallas o peleas, sino que trata de resolverlo todo de una manera diferente. Creo que eso es lo que es hermoso acerca de la Mujer Maravilla.
¿Piensa que es por esto por lo que la película ha llegado tan bien a la audiencia femenina?
Honestamente, creo que esta película no solo es importante para las chicas, sino que también es importante para los chicos. Como estamos hablando de empoderar a las mujeres, en primer lugar es importante que las niñas tengan una figura femenina fuerte a la que observar; pero, al mismo tiempo, es importante que los niños también tengan una figura femenina fuerte para observar. No podemos hablar de dar fuerza e igualdad total a las mujeres sin educar a los hombres también. No es algo unilateral, necesitamos que ambas partes estén en esto juntos.
¿Siente que este mensaje ha llegado claramente a la audiencia?
Es interesante eso. Hace unas noches tuve una conversación con mi hija mayor, Alma, de cinco años. La llevé a dormir, le estaba leyendo una historia sobre princesas y entonces ella dijo: “¡Los príncipes por lo general son muy fuertes!”. Y le pregunté: “¿Y las princesas?”. “Ellas son débiles”. “¿Y cómo crees que deberían ser, Alma?”. Entonces ella dijo: “¡Deben ser fuertes, deben ser fuertes!”. Me siento muy orgullosa de que finalmente con esta película se está mostrando ese ángulo, porque todos los hombres, desde niños, siempre tenían un héroe para admirar, ya fuera Supermán o Batman o el que fuera. Mientras que las chicas usualmente veían un modelo en el que las princesas son pasivas, a ellas las salvan. En cambio la Mujer Maravilla no tiene miedo, es proactiva, cree en sí misma y cree que puede hacerlo todo. Eso es una verdadera mujer para mí.
¡Ya que nombra a su hija Alma, felicitaciones por su bebé Maya!
¡Gracias! Ella es muy especial porque yo ya estaba embarazada de ella cuando rodamos La Mujer Maravilla y en algunas escenas que filmamos se podía notar algo de mi barriga. Tuvimos que ocultarla con efectos especiales, pero eso no obstaculizó el proceso del rodaje porque pude hacer escenas con exigencia física. Ahora es agradable mirar la película y saber que Maya también está en la película conmigo, de alguna manera. Me encanta eso y soy feliz. Realmente creo que todo sucede por una razón. Fue por este personaje que quedé embarazada de Maya y su nacimiento en marzo fue como un buen augurio de que esta película, al igual que ella, iba a cambiar mi vida de una forma positiva.
¿Qué cosas importantes está tratando de enseñarle a Alma y va a enseñarle a Maya?
A amarse a sí misma, a tener buena autoestima, a respetar a los demás y respetarse a sí misma. Creo que al final del día, si te amas lo suficiente… No estoy hablando de ese amor a ti mismo en el que vas a mirarte en el espejo y dices que eres una reina, no; me refiero a estar orgullosa de lo que eres, a tener una personalidad fuerte y un carácter fuerte, pero al mismo tiempo a ser cálida con el mundo, a ser amorosa y a tratar de rodearte de gente que tiene esas cualidades. Esa es la manera en que lo veo. Les inculcaré que crean en sí mismas, que sean siempre respetuosas con todo el mundo y que se amen a sí mismas por lo que son.
¿Alma se ha adaptado a su nueva hermanita?
Ha sido muy especial. Ella tiene cinco años de edad y en general ha estado muy entusiasmada. Quiere tenerla al lado todo el tiempo, pero Maya no tiene ni seis meses todavía y es muy temprano para que pueda interactuar como Alma quisiera. ¡Ya habrá mucho tiempo para eso! [risas].
Vayamos a sus años de infancia y adolescencia. ¿A qué mujeres admiraba en esa época?
Tengo que decir que creo que el modelo más grande que seguí, y que aún admiro mucho, es la cantante y poeta Maya Angelou. Siempre me encantó su agenda ideológica, la forma en que se expresaba y todos los mensajes que tenía que decir. De hecho, le puse Maya a mi hija más joven en honor a ella. Esa mujer tuvo un gran efecto en mí.
¿Y cuál es la historia del nombre de Alma, su hija mayor?
En hebreo antiguo “alma” significa “universo”. Estaba buscando significados profundos cuando nombré a mis hijas. Me siento muy bien de haberlas traído a este mundo. Mi esposo es el que controla el sexo de nuestros hijos y afortunadamente me dio dos hermosas niñas saludables [risas].
Estuvo dos años en el ejército israelí. ¿Qué tanto le ayudó esa época de su vida con las escenas de acción en sus películas?
Bueno, quiero aclarar que yo nunca luché en el ejército. Fui instructora de combate, pero nunca luché en el campo. Lo que yo hacía era trabajar en un gimnasio, dando formación y manteniendo a los soldados en buena forma. Pero supongo que en lo único que me ayudó fue en que durante esos dos años yo me mantuve muy activa y con un gran nivel físico. Cuando trabajé para The Fast and the Furious tenía un excelente estado físico y estaba segura de la forma en que había que moverse.
¿En su vida real, cuándo se siente usted como una mujer maravilla?
Cuando tengo a mis chicas en mis brazos. Sé que suena cursi, pero cuando das a luz te sientes como si fueras un dios. ¡Oh, Dios mío, yo hice este pedacito de vida! [Risas] La mejor sensación de sentirse uno como una mujer maravillosa, es cuando uno se convierte en madre y trae una nueva vida.
MARIO AMAYA
REVISTA BOCAS
EDICIÓN 66 - AGOSTO 2017

Una maravilla de mujer
Entrevista con Gal Gadot
Por Mario Amaya
Revista BOCAS
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