Contamos, además, con el invaluable apoyo del ex presidente Alfonso López Michelsen, una de las más claras inteligencias nacionales, y del ex presidente Julio César Turbay Ayala, quien ha sabido defender siempre las instituciones democráticas y el ideario liberal.
El Partido Liberal está hoy más unido, vigoroso y dispuesto a continuar dando las grandes batallas a favor de los grandes intereses nacionales, y en especial de la reconciliación nacional. El liberalismo sigue siendo la más firme alternativa de poder al servicio del pueblo.
El próximo domingo iniciaremos un nuevo amanecer para Colombia, porque comenzaremos a desactivar la aguda polarización política que vive nuestra democracia por culpa de quienes han interpuesto los intereses particulares a los de la nación y han sembrado odios en aras de sus ambiciones desmedidas de poder.
Como liberales reconocemos la fuerza política independiente de la doctora Noemí Sanín, y respetamos su identidad, sin tratar de absorberla a base de pactos y propuestas burocráticas.
Me comprometo a hacer todo lo que esté a mi alcance para que los independientes puedan dirigir los organismos de control y fiscalización de Estado y ejercer su legítimo derecho a la oposición.
Me comprometo con las mujeres de Colombia a brindarles todas las garantías para que se respeten sus derechos, contribuyan, aún más, al engrandecimiento de la Patria y jueguen un papel fundamental en el logro de la paz. Estoy seguro de que María Emma Mejía les abrirá paso a las mujeres, para que, más pronto que tarde, rijan los destinos de la Nación, para bien de los colombianos.
La violencia es, sin lugar a dudas, el problema más grave que tenemos los colombianos. Soy el ciudadano más preparado, con la mayor voluntad política y la más amplia experiencia para alcanzar la paz. Por mi compromiso con la reconciliación, soy el único colombiano que ha recibido la confianza de cuatro presidentes de la república frente a este tema. Por ello, no acepto avales a mi gestión a favor de la reconciliación, ni el manoseo electorero y oportunista de ese propósito nacional, que ha hecho la campaña conservadora de Andrés Pastrana, en su táctica desesperada de desinformación y desprestigio de mi trayectoria pacifista.
Pero siquiera ocurrió este episodio porque quedó demostrado que no soy yo, precisamente, el candidato del mono Jojoy .
Alcanzar la paz no será fácil, pero no vamos a desfallecer ni a ceder un ápice en este anhelo colectivo. A partir del próximo lunes, como presidente electo de todos los colombianos, comenzaré a definir las acciones inmediatas para generar el clima que se requiere para iniciar el proceso, que lideraré personalmente.
Cuando alcancemos la paz, habremos derrotado la intolerancia, el odio, la inquina, y podremos construir entre todos el país que hemos soñado, en donde existan la equidad, la ley, el respeto y una mejor calidad de vida para todos. Con el aval que me brindará mayoritariamente el pueblo, el próximo domingo haremos realidad un contrato social y democrático con Colombia. La paz es el verdadero cambio. Ese es nuestro compromiso con la Patria.
* Candidato del Partido Liberal a la Presidencia