Hace pocos días visite a Germán Arciniegas con sus 98 años a cuestas y recordamos que tenemos un compromiso en Paipa para recibir el 2000. Es asombrosa la lucidez mental de Arciniegas. Recordamos el maravilloso viaje con el poeta mexicano Pellicer y me dijo que lo había impresionado tanto el recuerdo de Monguí, Iza y el lago de Tota, que había dejado maravillosos poemas. Sobre el bello lago dijo: Si mojara mis manos en el lago / me quedarían azules para siempre / el paisaje es más claro / y hay una dulce paz, conmovedoramente . Sobre Iza dijo: En sus ventas de alcohol/ está mezclado con sol / sus mujeres y sus flores / hablan el dialecto de los colores/ .
Con el director de las fundaciones del Banco de la República, Guillermo Galán Correa, hemos pasado el artístico libro de Luis Duque Gómez sobre las obras realizadas por la Fundación del Patrimonio Cultural, especialmente en Monguí. Es indispensable que su impresionante catedral y el enorme y desocupado convento se los devuelvan a la comunidad franciscana, su primitivo dueño. Ojalá el señor obispo de Duitama y el padre Adolfo Galeano, provincial de los franciscanos, lleguen a un feliz acuerdo. Y mucho mejor ahora que la comunidad franciscana cuenta con su magnífica Universidad de San Buenaventura y que podrá desarrollar allí programas del más alto interés cultural y contando con la colaboración de destacados padres franciscanos oriundos de Monguí, como son los padres Acevedo y Montañés. Recordemos que Pellicer dijo sobre Monguí que era uno de los sitios más interesantes de América.
Y termino esta nota con una futbolística anotación. Voté por Pastrana, pero por Misael en el año 70 en el Frente Nacional porque así nos lo ordenaron los dos jefes del liberalismo Alberto Lleras Camargo y Carlos Lleras Restrepo. Que las vírgenes de Chiquinquirá y de Monguí le den mucha suerte a Andrés Pastrana Arango y haga una buena administración. Lo mismo que al jefe único del liberalismo, con 5.600.000 votos, Horacio Serpa Uribe, buena salud, y que dirija una oposición patriótica.