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COMISIÓN INVESTIGA PRESUNTA ACCIÓN CRIMINAL EN LA PAJARERA

Quince días después de la muerte de los seis miembros de una familia en el sector de La Pajarera, en Charco Azul, la Fiscalía decidió designar una comisión que se encargue de esclarecer insistentes versiones según las cuales no se trató de un hecho accidental..

Redacción El Tiempo
Testimonios anónimos aseguran en el sector que se trató de una masacre anunciada en la que pagaron justos por pecadores. La investigación inicial de las autoridades se desarrollaba sobre la hipótesis de una tragedia producto de un corto circuito.
Sin embargo, horas después de la madrugada en la que un incendio destruyó diez casas de La Pajarera, dentro de una de las cuales murieron los seis miembros de la familia Hernández Perlaza, empezaron a circular los rumores sobre la explosión de una bomba fabricada con gasolina que habría sido arrojada por error al cambuche donde residían estas humildes personas.
En el incendio murieron Teodora Perlaza, de 24 años, su esposo Wilson Hernández y sus hijas Liliana, de 11 años; Aideé, de 6; Yenny, de 4, y una pequeña de 18 meses.
De acuerdo con el reporte de la Policía, la conflagración se desató a las 4:00 de la mañana del pasado 28 de noviembre. Cerca de 30 personas lo perdieron todo y a la espera de solución se trasladaron a casas de familiares o amigos pues quedaron solo con la ropa que tenían puesta.
Eran diez familias que vivían hacinadas en los cambuches que quedaron reducidos a cenizas.
Vecinos de Charco Azul, que pidieron la reserva de sus nombres, dicen que la guerra interna entre grupos con características de pandillas y organizaciones delincuenciales que operan en la zona sería la causa de la muerte de la familia.
Estas personas aseguran que es una constante los enfrentamientos por poder territorial y delincuencial, que además de generar inseguridad llenan de temor a la población que resignada debe vivir esas situaciones.
El día anterior al incendio, dicen, se escucharon disparos y el ambiente fue tenso pues al parecer la disputa entre una banda de otro sector del barrio y el grupo que se ocultaba en un cambuche de La Pajarera se dio por una moto de alto cilindraje hurtada ese día.
Los testimonios hablan de que la familia habría sido baleada antes de que se prendiera fuego a la vivienda construida en esterilla y madera. No obstante, funcionarios de la Fiscalía localizada en la Casa de la Justicia de los Mangos señalan que esta información no es certera y explican que la designación de una comisión de fiscales para el caso obedece a que se trabaja sobre la hipótesis de un posible atentado.
También dijeron que de acuerdo con los testimonios iniciales de pobladores los disparos se presentaron al medio día del 27 de noviembre, por lo cual podría tratarse de una confusión.
De la madrugada del 28 de noviembre, una mujer que vivía en un cambuche cercano al de los Hernández Perlaza, solo recuerda una explosión que la sacó de inmediato de su cama.
Cuando abrí los ojos vi la pared envuelta en llamas y al lado de la puerta a mis hijos y a una amiga con su hijo, con quienes compartimos el cambuche. Yo estaba tan nerviosa que no podía abrir la puerta, pero afortunadamente lo logré y por eso nos salvamos , dijo ese día la señora, cuyo nombre se reserva para proteger su seguridad.
Otro residente del sector, quien a esa hora estaba despierto, dijo también ese día que lo único que escuchó fue una explosión que en fracción de segundos se transformó en un gran incendio.
Como todos los días dijo se levantó a las 3:00 de la mañana para empezar a alistarse para salir a trabajar y poco después oyó el estallido que solo dio tiempo para salir corriendo.
La vecina dice que la familia Hernández solo fue una víctima de la mala suerte.
Recuerda que ellos habían llegado cuatro días antes y eran personas muy formales. La familia provenía de Satinga, en la costa pacífica de Nariño y antes pagaban alquiler en una vivienda situada también en Charco Azul, a unas cuadras de donde sucedió la tragedia.
Ahora solo queda esperar los resultados de la investigación que se iniciará la próxima semana.
Redacción El Tiempo
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