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TEMEN VENDETTA DE NARCOS

El homicidio de Juan Carlos Ortiz Escobar, Cuchilla , la noche del lunes pasado en Cali, puso en alerta a las autoridades ante la posible reactivación de los enfrentamientos y venganzas de grupos vinculados al narcotráfico.

Redacción El Tiempo
El homicidio de Juan Carlos Ortiz Escobar, Cuchilla , la noche del lunes pasado en Cali, puso en alerta a las autoridades ante la posible reactivación de los enfrentamientos y venganzas de grupos vinculados al narcotráfico.
Ortiz Escobar, confeso narcotraficante que hizo parte del llamado cartel de Cali, fue atacado por hombres armados en momentos en que atendía un retén de la Policía en la Avenida Cañasgordas, en el sector de Pance, en el sur de la capital del Valle. Su escolta Edgar Hurtado Jurado también murió.
Según el general Heliodoro Alfonso Roa, comandante de la Policía Metropolitana de Cali, pasada las 7 de la noche del lunes el hombre y su escolta estaban presentando los salvoconductos de un revólver y una pistola que tenían en su poder cuando fueron rodeados por tres vehículos Mazda, de los cuales descendieron hombres con armas de fuego de largo alcance que dispararon contra ellos en repetidas ocasiones.
Ortiz Escobar murió de diez impactos de arma de fuego y Hurtado Jurado de siete. Los agentes que realizaban el procedimiento se resguardaron y cuando trataron de reaccionar los hombres habían huido, dijo Roa.
Desde la misma noche del lunes la Policía incrementó los patrullajes en la ciudad.
Estamos adelantando una investigación para establecer quiénes son los autores de este doble crimen, al parecer por venganzas personales. De igual manera, se ha determinado el seguimiento de algunas personas vinculadas al narcotráfico y que por disposición de las leyes ahora pueden gozar de libertad, para evitar que se incrementen los enfrentamientos entre estos grupos , precisó el general Roa.
El gobernador del Valle, Germán Villegas, dijo: nos preocupan estas vendetas y esperamos con el concurso de las autoridades evitar más hechos que lamentar .
Nueve meses de libertad
A Juan Carlos Ortiz Escobar, de 39 años, la libertad provisional que el Juzgado Segundo Penal de Ejecución de Penas de Palmira le había concedido en diciembre pasado solo le duró nueve meses.
Chuchillai , quien el 29 de marzo de 1996 se entregó a la justicia al aceptar cargos por tráfico de drogas y enriquecimiento ilícito, había cumplido las dos terceras parte de una condena impuesta por un Fiscal Regional del Valle y actualmente se encontraba en período de prueba. En 1997, cuando estaba recluido en la penitenciaría de Palmira, se graduó en Administración de Empresas de Economía Solidaria, lo que también le habría ayudado para su libertad provisional.
Este hombre, quien según la Policía hizo parte de la segunda generación de narcotraficantes del Valle, integró la nueva cúpula del cartel de Cali en compañía de Juan Carlos Ramírez Abadía, Chupeta , sindicado de enriquecimiento ilícito y quien también se entregó a la Fiscalía el 15 de marzo de 1996, y de Helmer Pacho Herrera, asesinado en 1998 en la penitenciaría de Palmira.
El 16 de diciembre de 1996 un fiscal lo condenó a pagar 11 años y dos meses de prisión y una multa de 138 millones de pesos.
En esa época, Ortiz Escobar confesó que en 1994 envió tres cargamentos de cocaína a Estados Unidos.
Según los informes de inteligencia de la Policía, Cuchilla era investigado por el homicidio del teniente Ricardo Andrés Peterson. También estaba sindicado de ordenar la ejecución y descuartizamiento con motosierras eléctricas del sacerdote Tiberio de Jesús Fernández y de 107 campesinos, en Trujillo (Valle).
Igualmente se trataba de establecer su responsabilidad en la presunta planeación de un frustrado atentado terrorista contra el general Rosso José Serrano, ex director de la Policía.
Foto. Archivo/ EL TIEMPO
Juan Carlos Ortiz, cuchilla (en el primer plano) se entregó en 1996 a la Justicia yc onfesó delitos de narcotráfico y enriquecimiento ilícito.
Redacción El Tiempo
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