Cerca del cierre, la lira bordeaba los 965 marcos alemanes, en comparación a los 976 cotizados al iniciarse el día, y bastante por encima de los 980, el nivel más bajo registrado alcanzados a principios de la semana, cuando fue anunciado el voto.
Los discursos de clausura del debate de confianza fueron interrumpidos previamente por las reacciones de escepticismo de los miembros del Parlamento ante las noticias de que Giorgio La Malfa, dirigente del pequeño pero influyente partido Republicano, había renunciado a raíz del escándalo.
La Malfa, quien dimitió tras ser oficialmente advertido de que se encontraba bajo sospecha de violar las leyes de financiamiento de partidos, es el segundo dirigente de partido que renuncia este mes a raíz del escándalo, luego que lo hizo el secretario del partido Socialista, Bettino Craxi.
Otros tres ministros se vieron obligados a renunciar en las últimas dos semanas, un éxodo sin precedentes que provocó que Amato reclamara el voto. El tiempo se está acabando para que restablezcamos la confianza , advirtió el Primer Ministro al Parlamento el miércoles.
La caída de La Malfa dejó confundidos a los opositores republicanos y afianzó el poder de Amato, al hacer todavía más remotas las oportunidades de encontrar una alternativa realista, dijeron analistas. La perspectiva del caos político que podría haberse desatado si Amato no era apoyado ayer fue probablemente lo que más influyó en la votación de los miembros del Parlamento, agregaron.
Ahora, es posible que se concentren en el referéndum que se convocará en abril en torno a una reforma electoral, y en la perspectiva de nuevas reglas para las elecciones generales que se celebrarán en octubre. Pero, el ritmo de los acontecimientos desatados por el escándalo impide una planificación confiable.
La renuncia de La Malfa fue la mayor sorpresa de todas, habida cuenta de su dilatada cruzada en favor de una reforma moral, y ratificó la creencia de varios miembros del Parlamento de que la llamada investigación manos limpias está fuera de control.
Un cuarto de los miembros de la Cámara están bajo sospecha de haber participado en dichos sobornos, la gestión del gobierno local se ha estancado en varios lugares del país y los contratos de obras públicas que impulsaron la producción industrial se han interrumpido totalmente.
Los parlamentarios se apresuraron a murmurar en privado que La Malfa no estaba bajo sospecha de estar involucrado en las redes de soborno de millones de dólares, presuntamente manejadas por los principales partidos políticos durante años.
Solamente se encuentra bajo sospecha de no haber notificado a las autoridades de una contribución de cincuenta millones de liras (33.000 dólares) para solventar los gastos de publicidad realizados en las elecciones generales celebradas el pasado abril.