Mientras se define el rumbo de la Ley de Televisión en el Congreso de la República, las deudas de las programadoras con la Comisión Nacional de Televisión (CNTV), por el arriendo de los espacios en los canales públicos, siguen en aumento.
(VER CUADRO: LA CARTERA DE LA CNTV).
De acuerdo con las cifras suministradas por la entidad, a abril pasado, las 21 empresas del sector sumaban compromisos pendientes por 26.182 millones de pesos, el 11,75 por ciento más que lo registrado en diciembre pasado cuando llegaba a los 23.427 millones de pesos.
Entre los programadores de televisión con mayor deuda se encuentra En Vivo que pasó en este período de 2.364 a 3.000 millones de pesos, UNI TV de 2.049 a 2.575 millones de pesos y CPT Televisión de 2.024 a 2.289 millones de pesos.
Del otro extremo de esta lista están Jorge Barón TV con 96,8 millones de pesos, Proyectamos TV con 194,84 millones de pesos y CM& Televisión con 203,73 millones de pesos.
La situación más difícil la afrontan los seis programadores de televisión que se encuentran bajo la Ley de Intervención Económica, cuyas deudas suman 10.163 millones de pesos.
En este grupo están En Vivo, Datos y Mensajes, DFL Televisión, CPT Televisión, Coestrellas, Big Bang.
De los 26.182 millones de pesos en cartera, 8.182 corresponden a cartera corriente, 705 millones a acuerdos de pago, 363 millones a intereses, 3.514 millones a mora y 3.251 a contratos cancelados.
Así, dentro de la cartera exigible normal se encuentra el 48,76 por ciento de los 26.182 millones de pesos.
Ricardo Lombana, coordinador de la CNTV, señaló a comienzos de este año que de continuar esta situación se estaría poniendo en riesgo la vida de la televisión publica, de los programadores y de la pluralidad informativa.
En su momento los programadores insistieron en la necesidad de tomar medidas estructurales para resolver la situación de los concesionarios públicos como la aplicación de menores tarifas y la consecución de créditos.
Al drama financiero se suma la devolución de espacios televisivos por parte de los programadores. Al cierre de 2000 la CNTV había recibido 80 horas de programación: 57 horas y media del Canal Uno, que representan más del 45 por ciento de su programación y 22 horas y media del Canal A, el 18 por ciento del total.
Inicialmente, la entidad había anunciado la apertura de una licitación en enero pasado para otorgar estos espacios. Sin embargo, decidió aplazar el proceso y hasta el momento no han sido asignados los espacios.