¡Que siga la fiesta!

Los jugadores han hecho público su agradecimiento a la hinchada bogotana. Han sentido un apoyo cercano. Algunos, incluso, muy cercano, como James Rodríguez, quien recibió los abrazos de cerca de 50 hinchas luego de marcar el gol para el 2-0 frente a Malí, el martes.

"Desde que comenzó el partido pensé: 'Si hago un gol, voy a celebrar con toda la gente', y así fue", dijo Rodríguez. "La mano izquierda me dolía antes del partido, pero en la cancha ya pasó. Uno está jugando por 45 millones de colombianos", agregó, tras recordar la lesión que casi lo saca de ese encuentro. Si Colombia obtiene el primer lugar del grupo A, permanecerá en El Campín en octavos de final. Y, si sigue ganando, volverá a jugar en la capital en cuartos. Solamente saldría de la ciudad para jugar una eventual semifinal en Pereira. "Trataremos de conseguir el primer puesto para quedarnos acá. No esperábamos tanto de la gente: desde que comenzó el partido nos están dando la mayor alegría. Esta es una unión y todos somos Colombia", señaló el volante Michael Ortega. Incluso, cuando el equipo ha jugado mal, como en algunos tramos frente a Malí, la Selección se sintió respaldada. "Hay cosas por mejorar, y en esos momentos es cuando más hemos sentido el apoyo de la gente", explicó el mediocampista Juan David Cabezas