El 10 de mayo de 1957, un paro promovido por los grandes gremios económicos,
que duró siete días, obligó al general Gustavo Rojas Pinilla a renunciar a la
presidencia de la República, luego de haber ocupado el cargo durante cuatro
años y pese a que el 30 de abril de ese mismo año la Asamblea Nacional
Constituyente había aprobado su reelección para el periodo 1958-1962.
Rojas optó por renunciar, siempre y cuando se salvaguardara la dignidad de las
Fuerzas Armadas. Para su reemplazo se designó una Junta Militar de cinco
miembros, conformada por oficiales que habían sido sus colaboradores. Recuerde
este hecho, hoy, en las cápsulas de Minuto 100, que se emiten por Citytv y
Canal ET