El viernes pasado, este profesor de religión había hablado de la experiencia de la muerte. Eso sucedió en una convivencia que compartió junto con diez docentes más.
Les dijo a sus colegas que recordaba con dolor la historia de un buen amigo que había muerto en Medellín, luego de que le propinaron varios tiros. Es que uno está acá y mañana quién sabe, dijo sin saber que un día después terminaría igual, pero como una víctima más de fleteo, un delito que cobra vidas en Bogotá.
Andrés llevaba seis años trabajando en el colegio La Enseñanza, en el área de Pastoral y como profesor de religión de los alumnos de quinto y sexto grados. Él era una persona responsable y amaba preparar a los niños en los sacramentos. Nunca decía que no tenía tiempo, dijo la hermana Isabel Gaxiola, quien trabajaba con él en el colegio.
Los niños que aprendían con él no han querido hablar desde que se enteraron de su muerte, y los padres de familia no han dejado de llamar a dar su voz de aliento. Ellos están muy afectados. No entienden por qué pasó esto. Él solo tenía 35 años, dijo compungida la hermana Isabel.
Andrés siempre se entusiasmaba preparando los detalles de las primeras comuniones y los bautizos del colegio. Madre, vamos decía con una sonrisa, contó Isabel, como recordando el eco de su voz.
También tenía una especial devoción por la Virgen de la Rosa Mística. El lunes pasado fuimos a centro y me hizo parar para comprarse la imagen de la niña María, la única pieza que le faltaba para completar su colección, contó Isabel.
Al igual que los niños del colegio, que se resisten a despedir al profesor juguetón, bromista pero exigente, se encuentra Melida Stella Casas, la novia de Andrés, a quien casi no le salen palabras para explicar el dolor que la embarga. Lo que tengo para decir es que me arrebataron al mejor el hombre del mundo, porque era un hombre de fe, bueno, noble y feliz con la vida, apasionado por la docencia y siempre con deseo de transmitir un mensaje de amor y alegría a sus estudiantes y a todos los que lo rodeábamos.
Una sentida despedida se está preparando en el colegio La Enseñanza, porque sus alumnos quieren darle el último adiós al profesor de apariencia amable que siempre los alegraba.
Al cierre de esta edición, los familiares de Andrés esperaban a que Medicina Legal terminara con todos los procesos de rigor y les entregaran el cuerpo.
En estado crítico, hombre que disparó contra profesor de religión.
El hombre, de 28 años, que el sábado al mediodía asesinó al profesor de religión Andrés Cruz, se encuentra recluido con pronóstico reservado en la unidad cardiovascular del Hospital Santa Clara. En el intercambio de disparos con la Policía, el hombre recibió seis impactos de bala. Uno entró por el tórax, los otros, en los brazos y en las piernas. El paciente llegó en shock hipovolémico. Perdió mucha sangre. Presentó fracturas de rótula y cúbito, reportó Edilsa Maury, gerente médica de turno del Hospital Santa Clara.
Al cierre de esta edición, el joven se encontraba sedado y respiraba con la ayuda de un tubo de ventilación. Esta persona deberá responder por los cargos de homicidio agravado, hurto calificado y secuestro simple. El policía que resultó herido el sábado, después de caer de una terraza, se encuentra hospitalizado en la Clínica de la Policía.
Me arrebataron al mejor el hombre del mundo; de fe, bueno, noble y feliz.
Apasionado por transmitir amor a sus estudiantes. Melida Stella Casas, novia de Andrés Giovanni Cruz Morales