Los vehículos decomisados son 30 camperos y 14 motocicletas, todos robados en diferentes ciudades colombianas y de Venezuela. El valor de los vehículos es superior a 500 millones de pesos.
El decomiso se realizó en Santa Rosa, a donde fueron trasladados por redes de delincuentes comunes, dijeron las fuentes.
Según la Policía, la red de delincuentes lleva los vehículos robados a Puerto Wilches (Santander), y a través del río Magdalena los transporta hasta San Pablo (Bolívar), donde son vendidos a la guerrilla, que los utiliza para su transporte.
Varios de los vehículos decomisados fueron utilizados para realizar movilizaciones subversivas hacia la serranía de San Lucas.
Los guerrilleros canjeaban algunos de estos automotores por armas, o los utilizaban como pago a los campesinos que permitían el uso de sus tierras para cultivos prohibidos, dijeron las fuentes.
Se indicó que la mayor parte de las transacciones las realizaba la cuadrilla Héroes y Mártires de Santa Rosa del Eln.
La operación de decomiso duró 48 horas, y en todos los casos los presuntos propietarios mostraron documentos falsos de inspecciones de tránsito de Barrancabermeja y Sahagún, dijo la Policía.
Entre tanto, ayer el Eln amenazó con incinerar los vehículos retenidos, en represalia por la acción de las autoridades.
En las acciones oficiales no hubo retenidos. El proceso pasó a conocimiento de las fiscalías de Bucaramanga y Simití (Sur de Bolívar).
En las acciones de las diferentes autoridades no se logro retener a ninguna persona.