Sin embargo, en el mundo interior del joven nortesantandereano más que los números, las estadísticas y los porcentajes, se movían otros intereses: los del arte dramático. Ese con el que había soñado desde pequeño y al cual sus padres se habían opuesto desde el comienzo.
De ahí que siendo condescendiente con su familia, decidió inscribirse en una universidad para hacer lo que supuestamente todo el mundo debe hacer: estudiar una profesión y prepararme para el futuro con bases sólidas , cuenta Aycardi.
Pero no funcionó del todo: Luigi rompió las reglas y decidió prepararse para actuar en un foro de grabación y aprender a conciencia los parlamentos que los profesores le entregaban para que se puliera como un profesional del arte: Pues me convencí de que el mundo de la actuación no era cualquier profesión rezagada ni mucho menos un espacio secundario.
Me convencí de que la actuación era una profesión tan respetable y seria como cualquier otra que se estudie en una influyente universidad .
Así fue porque, a pesar de su familia, el joven logró estudiar actuación en la Academia Charlot y complementarla con la otra profesión.
Sin embargo, cuando vinieron los pinitos actorales, la Administración de empresas quedó entre el tintero: La televisión comenzó a absorverme todo el tiempo y, la verdad, solamente me quedaba espacio para prepararme en el campo artístico.
Si por algún motivo tenía algo de tiempo libre, me dedicaba a modelar para ganarme lo de los dulces pero, finalmente, dejé de hacerlo , comenta el actor.
Escenas candentes Luego de presentar un casting al director Víctor Mallarino, Aycardi fue escogido para hacer parte de la novela Sangre de lobos y grabar cuatro capítulos de la trama. Era el amante apasionado de Carolina Millán (Kristina Lilley) y en una cama me estrené en la pantalla chica , afirma con sorna el artista.
Posteriormente, Aycardi ingresó al elenco de la comedia Vuelo secreto , donde hace el papel de Santiaguito, un personaje que, según sus palabras, ha evolucionado a través de los capítulos sin caer en estereotipos .
Aguas mansas , Dulce tormento (novela ecuatoriana) y Pecado santo han sido las otras producciones en las que el actor ha participado.
El papel de Germán Chica, el juez de Pecado santo , ha sido con el que mejor me he sentido gracias a la caracterización física y artística que logré imprimirle con el paso de los capítulos , dice el actor de 25 años.
Actualmente, trabaja en la comedia de Punch y en la novela Mascarada donde interpreto a Germán Ferrer, un director de cine que se ha dedicado a hacer comerciales y vive en un mundo de luces y lentejuelas .
Aunque sigue escalando en la televisión, Luigi Aycardi tiene un fantasma que no deja de rondarlo: Me gustaría trabajar en cine y hacer un papel con bastante carácter para demostrar que, en efecto, me puedo apropiar de matices actorales en escena .
Mientras tanto, el actor continuará realizando su Vuelo secreto dominical desde la agencia Lunaire y haciendo parte, entre semana, de una Mascarada .