Se trataba de la banda de pandilleras del sector Country Sur, Las Parceras . Este grupo de jóvenes de 13 a 20 años que durante 2 años y medio atracó y robó en el sector, cambió sus armas por rompecabezas y de ahora en adelante hace parte de una microempresa que diseña material didáctico para niños.
El jueves pasado sobre la mesa de la capilla, el sacerdote entregó a la Policía las 96 armas blancas, la pistola nueve milímetros y las armas de juguete, que estas jovencitas abandonaron como símbolo de arrepentimiento y de paz.
El sacerdote López dijo que estas mujeres tomaron la decisión de conseguir un trabajo y cambiar, después de que la pandilla rival abandonó las armas.
Hace como 2 meses iniciamos un diálogo con jóvenes milicianos y hace poco las pandilleras por voluntad propia se unieron con la intención de cambiar , dijo el sacerdote.
Actualmente estos grupos del sur de la ciudad que abandonaron las armas hacen parte de los Grupos Juveniles Unidos, dedicados al trabajo en la microempresa. Ellos trabajan en la creación de 900 juegos didácticos que se utilizan en las aulas escolares.
De este grupo hacen parte 40 jóvenes que ya se desarmaron y cuentan con el apoyo de la Iglesia , dijo el párroco.