Ahora, además de fecha, está por decidir el rival. Lo más aconsejable, dada la inactividad, es un rival con nombre, que reúna ciertas limitaciones poco técnica y pegada para evitar riesgos y crear en esta nueva etapa una conciencia ganadora en el ex campeón.
Pero yendo más allá, a la hora de buscar la reconquista, las cartas están sobre la mesa y con diferentes atractivos.
Oliver McCall, su antiguo sparring, reina en el CMB y es manejado por Don King. La otra semana la AMB llena la vacante con el pleito entre Tony Tucker y Bruce Seldom, ambos manejados por King. Por ahí, el aventajado promotor puede crear la ruta mundialista.
Pero hay caminos más llamativos. O si no pregúntenle a su amigo Riddie Bowe, rey de la OMB, quien lo visitó en la cárcel y le dijo que el negocio era pelear con él. Hay 120 millones de dólares para nosotros , comentó.
Sin pelear por título, porque no es campeón, enfrentar a Evander Holyfield tiene mayor significado. Una pelea entre ellos vendría a cristalizar aquella batalla que dejó afiches, placas y camisetas con la promoción correspondiente, pero que no se efectuó por la condena.
Pero por encima de todo, pese a los que se diga de la edad, el combate número uno sería con George Foreman, quien a los 45 años fue el hombre de 1994 en el deporte mundial. A esa bolsa, póngale la cifra que se le ocurra. Por supuesto, En millones de dólares.