¡Hola !, Tu correo ha sido verficado. Ahora puedes elegir los Boletines que quieras recibir con la mejor información.

Bienvenido , has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.

Hola Clementine el correo baxulaft@gmai.com no ha sido verificado. VERIFICAR CORREO

icon_alerta_verificacion

El correo electrónico de verificación se enviará a

Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.

SI, ENVIAR

Ya tienes una cuenta vinculada a EL TIEMPO, por favor inicia sesión con ella y no te pierdas de todos los beneficios que tenemos para tí.

Archivo

CÓMO HACER UN CHISTE

Dicen que con el salario mínimo vive uno. Pero no sobreviven dos. Sinembargo, a pesar de todo, es necesario conservar el buen humor. Por eso, hoy pretendemos ilustrar a los ingeniosos sobre el mecanismo para hacer un chiste. Se trata de ajustar piezas, como quien arma un motor. Como los motores, hay chistes de combustión interna, que son los que al contarlos la gente se ríe para sus adentros. Los hay de explosión, los cuales hacen estallar de risa al más serio. Y hay chistes de chispa retardada, que son los que hacen reír a la gente cuando el cuentachistes se ha ido.

Luis Noé Ochoa
Para armar uno, primero que todo colóquese un overol de colores ridículos. Lávese las manos de pecados y prejuicios. Agudice el caletre y aliste bastante guasa. Revuelva en una chistera limpia unas dos libras de gracia y tenga a mano un desternillador estrella.
Busque luego un soporte consistente y entrelácelo con una abrazadera bien engraciada . Si ve que no le queda muy consistente, póngale arandelitas. Si le falta, eche mano de un churrusco para que hagan contacto los cosquillómetros.
El motor debe haber sido probado, sobre todo en el funcionamiento de los despistones . También hay que revisar que el auditorio tenga bien asegurado el bloque. Que no se le vaya a saltar a nadie. Además hay que tener mucho cuidado en que el acelere no sea excesivo, pues se corre el peligro de que a un oyente se le salten los casquetes... dentales.
La calibración tiene que haber sido medida, preferiblemente al oído. El motor de un chiste debe estar full de Esso, de lo otro, de aquello, de lo de más abajo... No debe quedar escape de humores negros y ofensivos para no contaminar el ambiente.
Se le puede echar un aditivo verde, pero en una cantidad muy medida. Este aditivo va de acuerdo al terreno donde ruede el chiste. Porque a veces debe ser blanco o rosado, de bajo octanaje. La parte eléctrica debe tener la chispa adelantada.
Cuando todo esto esté bien revisado, póngalo a funcionar en un recinto cerrado. Hágale una prueba de fuerza. Si le quedó débil, no se lo suelte a nadie. Si le quedó con suficiente fuerza y gracia, échelo a rodar, pero no dé garantía de duración, ni de éxito. Porque un buen chiste depende de quién lo suelte. Y un mal cuentachistes puede arruinar al mejor inventor, además de hacerlo quedar en ridículo. Hacer, pues, un chiste, tiene su chiste.
Ah, cierto, ibamos a hablar del salario mínimo, pero eso es un chiste cruel.
Luis Noé Ochoa
icono el tiempo

DESCARGA LA APP EL TIEMPO

Personaliza, descubre e informate.

Nuestro mundo

COlombiaInternacional
BOGOTÁMedellínCALIBARRANQUILLAMÁS CIUDADES
LATINOAMÉRICAVENEZUELAEEUU Y CANADÁEUROPAÁFRICAMEDIO ORIENTEASIAOTRAS REGIONES
horóscopo

Horóscopo

Encuentra acá todos los signos del zodiaco. Tenemos para ti consejos de amor, finanzas y muchas cosas más.

Crucigrama

Crucigrama

Pon a prueba tus conocimientos con el crucigrama de EL TIEMPO