Hacia las 3:05 de la tarde, según los registros de la Secretaría de Tránsito y Transporte (STT), los semáforos instalados en la 7a., entre las calles 30 y 46, quedaron fuera de servicio con las luces amarillas intermitentes al faltarles el fluido eléctrico.
A esa hora, circulan alrededor de 1.300 vehículos por ese tramo de la 7a. De ahí que los trancones comenzaron a formarse y los conductores y pasajeros a desesperarse. Principalmente, quienes iban apurados por el Pico y Placa que comienza a las 4 de la tarde y que los iba a sorprender en la vía.
Luego, hacia las 4:30 de la tarde, quedaron sin luz los semáforos instalados entre las calles 90 y 95, y de las carreras 9a. y 11, informó la STT.
Según Codensa, los semáforos en el sector de la carrera 7a. se quedaron sin energía debido al daño presentado en un circuito que cubre la zona comprendida entre las carreras 5a. y 7a., y de la calle 30 a la 46.
Sobre la razón del apagón de los semáforos entre las calles 90 y 95, Codensa sostuvo que la causa había sido el granizo caído en la tarde que afectó algunos circuitos.
Fuentes de esa empresa aseguraron que estos daños son normales: ocurren alrededor de unos 15 diarios.
Sin embargo, desde hace varias semanas los semáforos están apagándose por falta de energía. El 30 de noviembre, varios instalados en la calle 26 quedaron fuera de servicio y colapsaron la vía. Luego, algo similar sucedió en la avenida Suba con avenida Cali. Para Codensa, estos hechos son cotidianos. Para Tránsito, esta situación es un caos.
Archivo / EL TIEMPO