Hervía de gente porque según Germán Cuervo, industrial del cuero y vicepresidente del Comité pro Desarrollo Integral de San Benito, el 95 por ciento de la población salió a participar en la campaña cívica, ecológica y sanitaria que se inició a las 7 de la mañana.
San Benito, a las orillas del río Tunjuelito, es asiento de factorías dedicadas a procesar el cuero para diferentes usos industriales.
A las 10 de la mañana se notaban las calles sin un papel ni un montoncito de tierra. Pero la maquinaria de la Empresa de Acueducto y Alcantarillado, la Secretaría de Obras Públicas y la Empresa Distrital de Servicios Públicos (Edis) seguía en la labor de secar las aguas negras que se devuelven por las alcantarillas, debido a que se taparon a fuerza de acumular residuos.
La campaña incluyó la colocación en todas las puertas de las factorías, por los propios dueños y trabajadores, de un letrero que indica sellamiento voluntario, para indicar que hay compromiso del alma , para que San Benito mejore por completo sus condiciones sanitarias.
Fue organizada por la Alcaldía Mayor, la Consejería Social, el Departamento Administrativo del Medio Ambiente (DAMA), las secretarías de Salud y Obras Públicas, el Departamento Administrativo de Planeación Distrital, la Corporación de los Ríos Bogotá, Ubaté y Suárez (Car), la alcaldía local de Tunjuelito, la Junta Administradora Local, el Comité pro Desarrollo Integral de San Benito, la Acción Comunal y el Ministerio de Desarrollo Económico.
La jornada de ayer contó con la presencia de la directora del DAMA, Elizabeth Grijalba de Rodado; el consejero social, Eduardo Díaz Uribe; el subgerente de operaciones de la Edis, Luis García, y el alcalde local, Marco Aurelio Muñoz Herrera, entre otros funcionarios.
Hubo limpieza y vacunación, a cargo de la Secretaría de Salud.
Esta última dio una cierta sorpresa, al expedir una declaración de zona de riesgo, lo que pudo tomarse por los industriales como una amenaza, pero no causó problemas y el consejero Díaz Uribe dijo que la posición del gobierno se refleja en lo que acontecía ayer por la mañana en San Benito, es decir, en un trabajo concertado.
Pero apenas fue el comienzo, pues el sábado próximo se dedicará a la desinfección de tanques y el siguiente, a la desratización.
Según Cuervo, hay 310 industrias, la más barata de las cuales cuesta veinte millones de pesos; en promedio, la mayoría está avaluada en 200 millones de pesos cada una.