Y mientras se daban las últimas puntadas para una invasión que se ha esperado desde hace meses, el secretario de la Presidencia, León Panetta, pronosticó ayer que a pesar de la oposición que hay en el Congreso a una intervención estadounidense de Haití, en última instancia, el pueblo siempre apoyará a su presidente . No obstante, las últimas encuestas publicadas esta semana indicaron que el 73 por ciento de los estadounidenses se oponen a que EE.UU, invada, cifra que contradice las anteriores afirmaciones.
Sin embargo, Panetta reiteró que el momento para que los militares abandonen Haití es ya. De lo contrario, muy pronto se tomará acción en contra de ellos .
Preparativos militares Mientras tanto, las tropas del Caribe anglófono que colaborarán con Estados Unidos en una posible invasión de Haití comenzarán a adiestrarse a partir de mañana en el campamento de Santiago de la Guardia Nacional puertorriqueña, en el municipio sureño de Salinas.
Medio centenar de soldados de Trinidad y Tobago llegaron ayer a la base naval de Roosevelt Roads, en Ceiba, al igual que quince efectivos de Gran Bretaña (la Marina estadounidense no ha informado sobre los trabajos que efectuarán los militares británicos).
Con la llegada de los soldados de Trinidad y Tobago, serán 200 los militares del Caribe anglófono concentrados en Puerto Rico, que en Haití tendrán responsabilidades principalmente policiales para restablecer el orden y controlar los disturbios civiles.
Así, mientras que el número de soldados caribeños deberá sumar para el martes 20 de septiembre 266 efectivos, la cadena de TV de EE.UU., CBS, informó que las Fuerzas Armadas de EE.UU. estarán listas para invadir el próximo martes, fecha en la que se encontrarán frente a las costas de ese pequeño país caribeño dos portaaviones y más de 10.000 soldados estadounidenses.