Odontólogos, pediatras, médicos generales y esteticistas que no encuentran cabida en el mercado laboral tienen oficinas propias para atender a sus pacientes. Hay otros que las tienen paralelas a sus trabajos.
Sin embargo -dicen- este no es el gran negocio, debido a que gran parte de la población está cubierta por una Empresa Promotora de Salud (EPS), una de medicina prepagada o por el Sisben.
Expertos en el tema consideran que quiza el mayor campo de acción para los profesionales de la salud que trabajan como independientes está en la odontología y en la estética, debido a que son especialidades que no tienen una amplia cobertura en el Plan Obligatorio de Salud, y al auge que existe por tratamientos y cirugías para lucir mejor.
El cirujano Gustavo Andrés Hincapié, reconoce que es así y es por ello que cada día surgen más empresas de garaje por así llamarlo, que ofrecen cirugías sin tener las licencias y las condiciones físicas para realizarlas.
Más que requisitos El profesional dice que en este campo hay que cumplir muchos más requisitos para ser independiente, debido a que está de por medio la salud de la gente.
Además de los registros en las cámaras de comercio y en la Dian, los médicos y cirujanos deben presentar documentos ante la Secretaría de Salud, estudiar entre 4 y 5 años para ser miembro de la Sociedad Colombiana de Cirujanos Plásticos y asistir como mínimo a un congreso nacional y a uno internacional.
Además de esto deben recibir anualmente una visita de la Secretaría de Salud y demostrar que cumple con todos los estándares de sanidad y la infraestructura idónea para intervenir quirúrgicamente a un paciente. Pero como en todas las empresas, mientras a los legales les exigen cada vez más, hay profesionales que trabajan ilegalmente y ofrecen tarifas muy por debajo de las reales y esto hace que el reto sea más difícil para los médicos.
Gustavo Hincapié lamenta que en Colombia no haya especialidades reglamentadas, a excepción de la del anestesiólogo, pues dice que esto permitiría oportunidades para los profesionales. En Colombia, los extranjeros son los que más consultan a los profesionales independientes.