La propuesta de los comerciantes, agrupados en Asobares (reúne a 60 establecimientos del parque la 93, Chapinero y la zona rosa), y de Redpapaz (integra a 46 colegios de la ciudad, Barranquilla y Cúcuta) es que los jóvenes puedan solicitar su contraseña antes de cumplir 18 años, de tal manera que una vez tengan la mayoría de edad reclamen la cédula original y esta sea la que se les exija.
La registradora nos explicó que la contraseña no es un documento de identificación, solo sirve para mostrar que la cédula está en trámite, contó Camilo Ospina, presidente de Asobares.
Según Carolina Piñeros, directora ejecutiva de Redpapaz, Rengifo también les aseguró que con la renovación de la entidad la expedición de las cédulas solo demorará tres meses.
De esa manera, lo más conveniente es solicitar a los jóvenes la cédula original cuando deseen ingresar a un bar. Y si solo tienen la contraseña que se esperen los tres meses, aseguró Ospina.
Asobares y Redpapaz están esperando a que la Registraduría les entregue por escrito este concepto para comenzar a preparar una campaña de concientización entre los jóvenes, pero también entre los dueños de bares y discotecas con el fin de que no dejen entran a muchachos que porten contraseña.
Rodrigo Pérez, director de Novedades de la Registraduría, aseguró que la entidad ya está expidiendo las cédulas con prontitud, pero el imaginario de la gente es que esto no es así y por ello en este momento 830 mil cédulas no han sido reclamadas.
Encuestas realizadas en el 2005 por Redpapaz y los ministerios de la Protección Social y Educación mostraron que a los 13 años los jóvenes comienzan a beber