Ahí están los habitantes de la calle. Le pueden producir miedo, repulsión o
compasión. Pero desde ayer, y por los próximos 5 meses, los verá de otra
forma gracias a unas obras de teatro callejero dirigidas por Julio Ferro, y
que buscan sensibilizar a la ciudadanía sobre la magnitud de esta
problemática.
Por:REDACCION EL TIEMPO
06 de abril 2006 , 12:00 a. m.
Estarán en alguno de los 25 escenarios escogidos por el Departamento
Administrativo de Bienestar Social del Distrito (Dabs) para esta campaña.
Puede ser un parque, una plazoleta, un centro comercial o una universidad.
Ver la obra le quitará solo 12 minutos. La mendicidad, la adicción a la
droga, el habitar la calle sin tener un lugar fijo a donde ir, el encuentro
con el ciudadano que lo mira con recelo y la llegada de estas personas a la
ayuda del Estado son los aspectos que se podrán ver en el montaje teatral.
Maritza Fuenmayor, del Dabs, afirma que también se pretende que el
ciudadano sepa qué se hace por ellos desde las instituciones.
Que se concienticen sobre la necesidad de apoyar los programas.
Rehabilitarlos es un trabajo duro y largo, y empieza por invitarlos a pasar
un día en el hogar de paso, dice.
Ayer, en el lanzamiento en la Plaza de Bolívar, 600 exhabitantes de la calle
avalaron la obra, escrita por Julio Ferro. El director dijo que el aporte de
estas personas fue muy importante. Por eso espera que al ciudadano que tiene
casi todo para ser feliz le sirva la experiencia de ver el montaje. Ojalá
le movamos el alma a la ciudadanía.