Archivo

ASESINADO SENADOR COMUNISTA

Nos dieron . Fueron las únicas palabras que alcanzó a pronunciar el conductor del senador Manuel Cepeda Vargas, antes de que éste cayera asesinado en sus piernas. Eran las 9:05 de la mañana cuando una camioneta Luv blanca de platón alcanzó al montero verde de placas BBZ 824 en que viajaba el presidente de la Unión Patriótica (UP) acompañado por su conductor y un escolta.

Redacción El Tiempoagosto 10 de 1994, 12:00 A.M.

Hacía cinco minutos habían abandonado la casa de Cepeda en Ciudad Banderas, en el suroccidente de Bogotá. El vehículo se movilizaba por la avenida de las Américas, en frente de la carrera 74, en el barrio Mandalay cuando fue alcanzado por los sicarios.

Uno de los tres ocupantes de la camioneta blanca disparó varias veces contra el senador, que se encontraba en el asiento delantero derecho. Cepeda leía los periódicos y llevaba el vidrio abajo. Uno de los disparos ingresó por la parte izquierda del vidrio panorámico del carro. El conductor de Cepeda gritó y siguió la marcha por 30 metros hasta cuando el cuerpo del senador cayó sobre sus piernas.

En ese momento el escolta, contratado por la UP para vigilar al senador, descargó los seis tiros de su revólver 38 largo contra la camioneta, aunque los asesinos continuaron la huida sin inmutarse.

El senador ya estaba muerto. Los vecinos cerraron las ventanas y los transeúntes se devolvieron. Sólo una persona se acercó al lugar, pero al ver la escena huyó también.

No habían transcurrido 10 minutos, cuando el hijo del senador, Iván Cepeda, vio en la mitad de la calle el vehículo de su padre detenido y con el vidrio delantero roto. Pensó que se había estrellado. El entonces abandonó el bus ejecutivo en el que se dirigía a su trabajo en el centro de la ciudad y encontró a su papá muerto.

Inician investigación

Cepeda no alcanzó a llegar al Senado, en donde participaría en el debate al proyecto de ley por medio del cual Colombia adhiere al Protocolo II de la Convención de Ginebra, que establece el respeto de las partes en conflicto a las normas del Derecho Internacional Humanitario.

El hijo del senador dijo, pocos minutos después, que el asesinato de su papá es un crimen de Estado. Mi papá había denunciado un plan dirigido por altos mandos militares cuyo nombre es Plan Golpe de Gracia contra el Partido Comunista y la Unión Patriótica. el Partido Comunista denunció varias veces ante el Presidente y el Ministro de Defensa Rafael Pardo Rueda que el plan se estaba ejecutando. No es necesario hacer un gran esfuerzo intelectual para saber que esto es obra de ese plan que él había denunciado con tanta insistencia .

También denunció que al senador Cepeda lo amenazaban constantemente, que recibía llamadas a la oficina del Congreso, a la casa y a la oficina del Comité Central del Partido Comunista.

El conductor de Cepeda dijo que el lunes el congresista recibió una amenaza por escrito en su oficina del Senado y que además de su nombre se encontraban los de varias personalidades de la vida nacional.

Incluso yo le había dicho -aseguró el conductor- que me tocaba dejar de acompañarlo porque tenía algunos problemas económicos y él me dijo tranquilo, si lo van a matar en otro lado, pues que nos maten a los dos .

Al lugar en donde fue asesinado Cepeda llegó, hacia las 11 de la mañana, el presidente del Congreso, Juan Guillermo Angel, quien expresó su condolencia al hijo del senador y repudió el homicidio.

Unidades de la Fiscalía y del Cuerpo Técnico de Investigaciones recibieron las declaraciones del conductor y el escolta del senador y practicaron las diligencia legales.

La Subdirección de Policía Judicial e Investigaciones (Dijin) ordenó de inmediato a todas las unidades de Policía de Bogotá rastrear el vehículo utilizado por los asesinos, aunque sin resultado alguno.

REACCIONES

Juan Guillermo Angel, Presidente del Senado

Nuevamente debemos colocar crespones negros sobre la curul de uno de los nuestros. Nuevamente debemos presentar condolencias al país y a nuestra democracia. Es hora de que aprendamos a estimar el valor de la vida y de la paz. Esa es una tarea del país entero.

Eduardo Pizano, senador de la Nueva Fuerza Democrática

A punta de asesinatos no vamos a llegar a ninguna parte. Aprender a convivir significa ser tolerantes. De lo contrario, jamás habrá manera de llegar al entendimiento. El Alto Comisionado para la paz habrá de iniciar una negociación en condiciones de credibilidad porque la paz no debe ser un medio para seguir haciendo la guerra.

Lorenzo Muelas, senador indígena

El Congreso debe sentar su voz de protesta, pero al mismo tiempo trabajar, de manera seria y responsable, por la viabilidad de la pacificación. Es absurdo que se hable de paz mientras crece la violencia. Si realmente amamos nuestra patria, no debe haber más derramamiento de sangre. El asesinato de Manuel Cepeda demuestra también que las minorías afrontamos una situación muy difícil, pese a que representamos a un pueblo mayoritario.

María Isabel Cruz, senadora conservadora

La muerte violenta del senador Manuel Cepeda Vargas no es solo un hecho lamentable, sino una nueva prueba de la desinstitucionalización que vive el país. El momento exige una respuesta enérgica y vertical de las autoridades, Con todo, conservo el optimismo y estoy segura de que el Alto Comisionado para la Paz obtendrá grandes logros.

Jaime Dussán Calderón, senador independiente

Ante la ola de violencia que se ha venido presentando y que hoy cobra dimensiones aterradoras, proponemos la creación de una Comisión Nacional de Pacificación, integrada por diferentes partidos políticos .

Samper: los violentos no pasarán

El Presidente Ernesto Samper Pizano repudió ayer el asesinato del congresista Manuel Cepeda y dijo que, pese a estos hechos de violencia, su gobierno no va a desfallecer en la búsqueda de la paz.

Los violentos no van a pasar en este país , Planteó enfáticamente Samper en diálogo con los periodistas en la Casa de Nariño.

Lamento este hecho de violencia que, por ningún motivo, nos va a hacer desfallecer en la búsqueda de la paz que siempre trató de conseguir precisamente una persona demócrata como Manuel Cepeda , aseguró el primer mandatario.

Los violentos no van a pasar en este país y estos hechos repudiables que el gobierno nacional condena de manera enfática, en vez de arredrarnos, nos va a seguir motivando, no solamente para mantener montada la guardia frente a cualquier forma de violencia, como la que ha cobrado en cabeza de esta figura de la izquierda democrática, sino de cualquier forma de violencia que pueda atentar contra los colombianos , agregó.

Un periodista le preguntó al presidente si el asesinato de Cepeda sería el recibimiento que se le dio al anuncio sobre diálogos con la guerrilla.

No califico el hecho. Lo repudio de manera enfática y categórica , respondió el Presidente.

Se comprometió a tomar todas las medidas que sean necesarias para que el hecho sea investigado hasta sus últimas consecuencias y para que los responsables sean castigados.

Es un boicoteo a los diálogos de paz : PCC y UP

Paradójicamente, mientras el Congreso abordaba ayer el estudio del Protocolo II de Ginebra que habla sobre la humanización de la guerra, el senador Manuel Cepeda, del Partido Comunista (PCC), fue muerto a tiros en una acción que su movimiento calificó de crimen de Estado .

Según la Unión Patriótica (UP) y el PCC, la muerte de Cepeda confirma sus reiteradas denuncias sobre un plan gestado desde sectores de las Fuerzas Armadas contra los principales dirigentes de estas agrupaciones.

La dirección comunista señaló que esas amenazas fueron comunicadas al entonces ministro de Defensa, Rafael Pardo, quien dijo que eso era una mentira .

Aquí está la prueba. Primero Miller Chacón (dirigente asesinado en noviembre pasado) y ahora Manuel , señaló Alvaro Vázquez del Real, secretario general del PCC.

Para Vázquez y la dirección comunista, este hecho también tiene como fin boicotear los posibles contactos entre Gobierno y guerrilla para reabrir las negociaciones, en vista del nuevo aire que estas adquirirían con el cambio de Gobierno.

Hay una provocación muy grave contra las posibilidades de llegar a la mesa del diálogo y negociación y encontrar una salida democrática y pacífica para esta ola de violencia que ha sacudido al país durante mucho tiempo , indicó Vázquez.

Por su parte, el subsecretario del PCC dijo que hay una conspiración contra la paz y salida política .

Y agregó: Habíamos denunciado con suma claridad la operación golpe de gracia . La OEA, a través de su comisión de derechos humanos, exigió protección cautelar a Cepeda y otros dirigentes del Partido. Esto anunciado, conocido y denunciado ante el Gobierno anterior y ante el Ministro Pardo, es un crimen de Estado. No tiene otra explicación y en ese sentido tiene que haber una responsabilidad oficial al respecto .

Reciba noticias de EL TIEMPO desde Google News

Redacción El Tiempoagosto 10 de 1994, 12:00 A.M.