Los ataques de los concejales al 1421 fueron coreados por trabajadores de las revisorias fiscales, que protestaron porque eliminó esos organismos. Uno de la barra gritó: El estatuto de Boyacá . El Alcalde Jaime Castro no se hizo presente como era tradicional en la apertura de sesiones bajo el anterior régimen, debido a que el nuevo no menciona esa asistencia. La corporación eligió presidente al abogado huilense Jorge Durán Silva, quien dijo a EL TIEMPO que sigue en el partido liberal porque el expresidente Julio César Turbay no le aceptó la renuncia.
Como primer vicepresidente fue elegido el abogado conservador Jaime Casabianca, y como segunda vicepresidenta Aída Abella, de la Unión Patriótica.
Casabianca ofreció renunciar más adelante, para ceder el cargo a su copartidario Juan Gabriel Uribe, del Movimiento de Salvación Nacional. Casabianca dijo que se tratará de buscar la unión del partido, para campañas tan importantes como la elección de Alcalde.
Uribe contaba ayer con el apoyo de algunos conservadores y de varios liberales. Uribe declinó por no perturbar la unión conservadora, luego de que Fernando Tamayo le exigió como condición para elegirlo, ingresar a la coalición que ha dominado el Concejo. Tamayo alegaba que si los conservadores elegían a Uribe sin condiciones, los liberales podrían incumplir posterioremente viejos pactos. Por cierto que la coalición mayoritaria, que hasta las pasadas sesiones tuvo solamente 16 votos -por 12 de la minoritaria- se vió aumentada a 18, sin que se hubiera logrado establecer quienes de la minoritaria se le sumaron. Al parecer uno de los dos votos es del concejal Jorge Pastrán, quien salió del cantón norte y entró en remplazo del ex ministro Enrique Parejo. Sus amigos dijeron que votó accidentalmente pero que se sumará a los minoritarios. El otro voto se volvió un misterio.
Durán Silva obtuvo 18 votos por nueve en blanco. Mauricio Jaramillo, de la coalición minoritaria, postuló para la presidencia a Alejandro Uribe, y con la advertencia de que no se refería aninguna persona en particular, dijo que al Concejo no le convenía hacer una elección que pudiera tomarse como un reto semejante al lanzado en el Congreso por el representante Ruiz Medina, quien llamó a indagatoria a los miembros del Consejo de Estado. Uribe no aceptó y en la votación obtuvo siete votos.
La presidenta saliente, Martha Luna, dijo que el estatuto deja una frustración a Bogotá, mientras Tamayo acusó al Congreso de haber sido mezquino con Bogotá, al no expedir el estatuto. Rincón Parra dijo que el decreto ley dará más de un dolor de cabeza a las autoridades porque es contradictorio.