La Junta analizó el Plan de Modernización presentado por Robayo, con miras a lograr una mayor competencia dentro del sector. Cabe recordar que al culminar el primer semestre de este año, la utilidad ascendió a 5.381 millones, es decir, 67.1 por ciento con respecto al año anterior.
Galvis, quien se desempeña como vicepresidente, desmintío una crisis en el banco. En este momento la entidad vive uno de sus mejores momentos financieros.
Igualmente, el viceministro de Hacienda, Héctor José Cadena, presidente de la junta directiva del Banco Popular, ratificó esa posición.
Sin embargo, el Comité Empresarial Permanente del Valle del Cauca y otros dirigentes del departamento habían expresado su inquietud por el posible traslado de la sede a Bogotá.
El proyecto de reestructuración del banco se propone mejorar la eficiencia acorde con la internacionalización y la apertura del sector financiero. Este plan está dirigido a los mercados empresarial, individual y un énfasis en las actividad comercial. Uno de los objetivos es disminuir la carga operativa a quienes ejercen tareas de gerencia para que se proyecten en el campo de la comercialización de los servicios bancarios.
El presidente saliente del Banco Eduardo Robayo destacó los resultados financieros de la entidad y el programa de ajuste y modernización de la entidad, el cual debe ponerse en marcha lo más pronto posible.
Según Robayo el Banco tuvo un mercado cautivo en el sector oficial, pero con la reforma financiera desde comienzos del próximo año tendrá que competir con el sector privado.
Por lo anterior, considera que no resultaba conveniente tener dos casas matrices: una en Cali y otra en Bogotá, aunque ya se decidió mantener la sede principal en la capital del Valle. Estoy muy satisfecho. Las utilidades a septiembre llegaron a 10.050 millones de pesos, 60 por ciento por encima al año pasado. El Banco va a poder superar los 12.000 millones de pesos en 1991 , dijo.