Aunque las operaciones se realizan en forma provisional, técnicos especializados en sistemas, ingenieros y operarios fueron enviados a la zona para la reparación de los equipos cuyas pérdidas superan los mil millones de pesos.
En el balance realizado ayer por Ecopetrol se estableció que las pérdidas en la estación Cóndor superan los 500 millones de pesos. Fueron destruidos dos computadores, el panel de operación de llenado de los tanques y de impulso del oleoducto, el sistema electrónico de potencia, la unidad de llenado de los tanques y la edificación.
Otras cargas de dinamita fueron colocadas en la planta de energía eléctrica, sin ser activadas. Esta planta surte de energía a Yondó y hace parte de la interconexión eléctrica entre Antioquia y Santander.
En cuanto a los daños en la compañía Ingeser, estos se resumen en la destrucción del sistema de limpieza de los pozos y los equipos de perforación. Las directivas confirmaron que los daños sumán más de 700 millones.
De otra parte se informó que en Norte de Santander, en donde el Ejército de Liberación Nacional (ELN) provocó la destrucción de tres tramos del oleoducto Caño Limón Coveñas esta semana, continuaban las labores de limpieza de las quebradas y caños que resultaron contaminados por el derramamiento de petróleo.
Las cuadrillas de operarios trabajaban sobre las zonas aledañas a los caños Tabiro y Tonchalá, a solo 10 kilómetros de Cúcuta. Se ha logrado la recuperación del 70 por ciento de los 15.000 barriles de petróleo derramados.
El bombeo en el oleoducto se reanudó ayer.