Jairo Beltrán Castro Especial para Tolima 7 días La ciudad de las piscinas no duerme. Sus habitantes no salen del asombro por el escándalo de las cintas con escenas triple X que se venden como pan caliente y en las que supuestamente aparecen jovencitas de ese municipio tolimense.
Comentarios van y comentarios vienen. Incluso, algunos afirman conocer a las chicas y sin proponérselo han sometido a varias niñas al escarnio público. Sin embargo, aún nadie, ni siquiera las autoridades, certifica que las filmaciones se hicieron en esa población y, mucho menos, que en ellas participaron mujeres del municipio y soldados americanos del Fuerte Militar Tolemaida.
En medio del escándalo, los expendedores de los videos son los más beneficiados, debido a que el precio de cada cinta subió de 2.000 a 5.000 pesos. Los videos comenzaron a ser distribuidos hace cuatro meses y ya son vendidos en video tiendas de poblaciones vecinas, como Girardot, donde las autoridades capturaron a un distribuidor pirata.
Y aunque el Alcalde, el Comandante de Policía y la misma Fiscalía niegan que alguna chica de Melgar aparezca en los videos, ya hay jovencitas que son señaladas. Una de ellas es Karen, de 18 años, quien reconoce que su vida se le volvió un infierno desde que empezaron a vender las cintas propias del cine triple X.
i los videos con mi familia, en el Comando de Policía. En este momento los abogados de la familia tienen dos denuncias listas contra dos personas que en la calle me gritaronvideoi . No es fácil para una joven ser señalada casi como prostituta, es injusto, afirmó la joven.
Karen salió a darle la cara a los comentarios porque ella no ha participado, ni aparece en ninguna cinta.
El mayor Jaime Alberto Barrera Hoyos, comandante del Distrito Ocho de Policía Melgar, dice que una investigación y ninguna de las mujeres que aparecen en los videos es de Melgar Lo cierto es que los videos tienen escenas fuertes y crudas, algunas rayan en violentas. Se observan escenas en las que aparecen hombres maltratando a su pareja o intentando ahogarla.
Según las autoridades de Melgar, ninguna de las mujeres que aparecen en las cintas son menores de edad y algunas podrían ser prostitutas.n algunos videos se observa cuando ellas dan el nombre y la edad, y en otros el nombre de lo que parece ser un barrio, pero ninguno de Melgarseñaló uno de los investigadores.
Foto:Los videos pornos son la comidilla en las calles de Melgar. El escándalo hizo que se disparara el precio de las cintas, que se comercializan clandestinamente.
