La medida está contemplada en el decreto 211 del presente mes, que lleva la firma del presidente César Gaviria Trujillo y del Ministro de Defensa, general Oscar Botero Restrepo.
El general Medina se retiró de la Policía Nacional el 31 de enero de 1989. Unas semanas después, la prestigiosa revista estadounidenese Time , sostuvo que su retiro obedeció a estrechos vínculos con el narcotráfico, que obligaron al presidente Virgilio Barco Vargas a relevarlo de su cargo.
Medina desmitió todas las acusaciones y las calificó de injuriosas y malintencionadas, y amenazó con iniciar acción penal contra dicho órgano de comunicación y contra un conocido noticiero de televisión colombiano. Sin embargo, dicha intención nunca se cumplió.
Posteriormente, Medina se vió involucrado en un investigación iniciada por la Oficina de Investigaciones Especiales de la Procuraduría General de la Nación, por enriquecimiento ilícito, en la cual también fue vinculado el entonces director de la Cajade Sueldos de Retiro de la Policía Nacional, general Eduardo Fajardo Venegas.
Según ese proceso, Medina poseía una serie de bienes y dinero en efectivo en varias cuentas bancarias, que al parecer habían sido obtenidos en forma irregular. Culminado la investigación, la Procuraduría Delegada para la Policía Nacional, en providencia del 25 de julio de 1990, ordenó la destitución del general cuestionado.
El Ministerio Público rechazó los argumentos presentados en su recurso de reposición de Medina y su abogado, Héctor Castillo Corredor, que pedía la revocatoria de la sanción.
El ente fiscalizador, consideró que Medina había evadidido el control fiscal de su patrimonio, que sobrepasaba en más del 300 por ciento de la capacidad normal de sus ingresos.
El general Medina, enfrenta actualmente dos procesos penales que cursan en la Corte Suprema de Justicia, por ambos casos, y su situación jurídica aún no ha sido resuelta.