El asesinato ocurrió ayer en la mañana cuando Rosas iba a desayunar con su esposa en su vivienda, localizada a una cuadra de la estación de Policía y a cinco de la alcaldía.
El funcionario había madrugado para evacuar asuntos de la administración pues en la tarde viajaba a Cali para ultimar los detalles del grado de bachiller de dos hijos. No tenía escoltas en ese momento, pues les había dicho la noche anterior que no fueran a recogerlo a su casa y sino que se verían en el despacho.
Cuando iba a sentarse a la mesa dos hombres en moto irrumpieron y le dispararon por la espalda. Rosas murió en el camino al hospital.
El andaba tranquilo, porque su único objetivo era sacar adelante el municipio , recuerdan las secretarias del despacho. Ayer su cadáver permanecía en cámara ardiente en el salón del Concejo Municipal.
La gobernación del Putumayo encargó de la alcaldía a la Secretaria de Gobierno, Flor María Otálvaro.
En los dos últimos meses, Rosas había estado al frente en la atención de las dificultades para los pobladores de Orito como consecuencia de los combates que en el Putumayo libran la guerrilla y paramilitares. Desde hace 69 días, las Farc realizan un paro armado que mantiene paralizadas las vías.
El Alcalde había trasladado a sus tres hijos menores a Popayán mientras se superaban los problemas de orden público en este departamento.
El gobernador de Putumayo, Jorge Devia, dijo que no hay claridad de los autores materiales, ni intelectuales del crimen. Solo hay rumores , comentó. El Ejército y la Policía han ofrecido apoyo para que el fiscal saque adelante la investigación.
Gilberto Toro, director ejecutivo de la Federación Colombiana de Municipios, dijo que la situación de los alcaldes cada vez empeora más sin que el Gobierno reaccione. Este año han sido asesinados 17 mandatarios.
Lo de Orito significa que no solo la población civil sino los mandatarios se están convirtiendo en blanco por la disputa que libran la guerrilla y las autodefensas por el territorio y los cultivos ilícitos , dijo.
En Colón, otro municipio putumayense, la guerrilla atacó ayer el puesto de Policía causando la muerte de un agente, un civil y heridas a cinco personas.
El alcalde de Sibundoy, Mauricio Guerrero, que se encontraba de visita en este municipio, resultó herido en la pierna izquierda durante la acción. Los guerrilleros también quemaron tres vehículos.
Por otra parte, en Pasto, el foro en el cual se analizaría el manejo hecho por el Gobierno al bloqueo guerrillero a la carretera que conduce a Tumaco y la situación de Putumayo fue suspendido debido a la cancelación de la participación de funcionarios de rango nacional.
Sin embargo, los gremios de la producción regional insistieron en la necesidad de avanzar en la realización de un paro cívico para protestar por la forma como el Gobierno ha manejado la situación de orden público en los dos departamentos, situación por la cual sus economías están al borde de la bancarrota.
La misma suspensión del foro acabó por aumentar el descontento y se decidió seguir en la programación del paro.
FOTO: LOS POBLADORES de Putumayo sufren desde hace dos meses los rigores del enfrentamiento entre la guerrilla y los paramilitares por el control de los cultivos de coca en la zona. Las ciudades permanecen militarizadas.