Lo mismo que decía cuando estaba en sus labores domésticas, lo dice ahora que está estudiando. Es la misma de siempre pero sin delantal. A ella le pusieron una tutela porque alguien opinaba que con su delantal demeritaba a los de su raza. Ella se lo quitó y se metió a la universidad para seguir diciendo lo mismo y no tener problemas , dice Consuelo mientras se ríe de las travesuras e ideas de esta negra.
Sin delantal y en la universidad sigue bailando currulao y mapalé, además sigue siendo la compañía de Hétor, su novio, quien de vez en cuando le despierta esas pasiones que Nieves llama sensibilidad dermatológica. Para Consuelo, la negra ha sido la amiga que encontró cuando más la necesitaba, ya que la sacó del aburrimiento de la oficina y además le dio la oportunidad de explorar otras facetas del arte, Sigo pintando. Pero Nieves es una cosa aparte, es alguien que nació por la urgencia de tener un trabajo agradable , comenta Consuelo.
Nieves es una mujer que sabe de todo y habla de lo que hay que hablar. Ahora que estudia dice lo mismo que antes, pero con algunas frases copiadas de filósofos, por ejemplo cambió la teoría de pienso, luego existo por bailo, luego soy . Es una dama llena de sabor y folclor africano, a la que le gusta su libertad, por eso, aunque ama a su novio, le tiene terror al matrimonio, cree en Dios y le reza a su manera, y no nos dejes caer en las tentaciones otra vez, Amén ; defiende a la mujer, sin ser feminista porque ni siquiera conoce esa palabra , asegura Consuelo y además odia las mentiras.
Esta mujer, coqueta y sensible, es sobre todo, una fiel representación de las culturas negras. Por eso Consuelo Lago aprovecha esta oportunidad para hacer un homenaje a una amiga antropóloga, que murió hace dos años y quien amaba a Nieves. Nina S. De Friedemann que trabajó en conjunto con Consuelo para dejar un legado de cinco cuadros en los que Nieves se ve vestida de africana.
La exposición se puede ver todos los días de 8 a.m. a 8 p.m. y los viernes hasta las 6 p.m., en el Instituto Cultura Brasil Colombia (Calle 93 No. 13A-75). Allí se ven cuadros representativos de las diferentes épocas de Nieves y se leen las mismas irreverencias de siempre y además se comprueba que esta negra no pasa de los 20 años, un privilegio, que como lo dice su creadora, solo lo tienen los personajes del arte.