Robert Metcalfe primero fue ingeniero. Le fue bien: en 1979 fundó una empresa que el año último facturó US$ 1.477 millones.
Pero después de algo más de diez años allí se cansó, vendió sus acciones de la compañía y se dedicó al periodismo informático: llegó a ser vicepresidente de IDG, el gigante mediático en el que trabajaba como columnista.
Ahí duró ocho años. Se entretuvo un par de años como consejero experto para empresas de informática, pero no terminaba de acomodarse, así que hace dos años y medio cambió otra vez de profesión, y ahora, con 57 años, es un inversor de riesgo en proyectos de tecnología.
"Pero en esto me podría quedar 20 años: creo que finalmente encontré mi vocación, que es la innovación tecnológica -le dijo Metcalfe en una entrevista telefónica a La Nación. Es un honor poder participar en esto, que es un poco lo que hice en mis carreras anteriores, también. La innovación en tecnología mejora la calidad de vida, cura enfermedades, sostiene economías... Tiene muchos abogados involucrados, es cierto, pero nada es perfecto. Es lo que hace que el mundo moderno dé vueltas, y me encanta estar en algo así".
Tan comprometido está, que hace 30 años desarrolló un dispositivo por el cual la mayor parte de los cibernautas transita en algún momento.
Se trata de la Ethernet, una tecnología que permite que dos o más computadoras se conecten entre sí (en una red interna o con Internet). En todo el mundo hay cientos de millones de computadoras con un puerto Ethernet instalado, y se calcula que el 99 por ciento del tráfico de Internet pasa, en algún momento, por una red Ethernet. No todos usan el protocolo exacto que definió Metcalfe el 22 de mayo de 1973, pero sí se basan en su diseño original.
En el aire.
Todo nació en el Palo Alto Research Center (PARC), el prolífico centro de innovación de la compañía Xerox. Allí se desarrolló la Alto, que fue la primera computadora personal con una interfaz con ventanas y mouse, y la impresora láser, entre otras cosas. Bob Metcalfe estaba en el PARC a principios de los años 70.
- Cómo era trabajar allí?.
-Era un lugar genial. Teníamos todos los fondos que necesitábamos, todo el tiempo del mundo, ingenieros y científicos muy inteligentes, que se entendían entre sí, y el agradable clima de Palo Alto, así que era como tener el cielo en la Tierra. Y estábamos muy avanzados; nosotros ya teníamos toda una tecnología de Internet cuando la Arpanet (la precursora de Internet) estaba dando sus primeros pasos.
En 1973, en el PARC querían conectar varias computadoras Alto a una impresora láser y no sabían cómo, así que le asignaron la investigación a Metcalfe. Las redes de computadoras en sí ya existían: en 1969 había entrado en funcionamiento la Arpanet. Y Metcalfe estaba en contacto con Vinton Cerf y Bob Kahn, que en 1973 desarrollaron los protocolos sobre los que viaja toda la información de Internet, los ahora famosos TCP/IP.
Así que la idea de una red de computadoras estaba en el aire, literalmente. Dándole vueltas al asunto, Metcalfe recordó que había leído un artículo sobre una red entre varios edificios de la Universidad de Hawaii, llamada Alohanet, que transmitía paquetes de datos por radio. Era la primera red inalámbrica de la historia. A Metcalfe no le servía como tecnología (los equipos de radio eran enormes y carísimos), pero sí el método de envío de datos.
- Qué lo atraía de Alohanet?.
-De su diseño tomé la idea de que todos compartían el medio (las ondas de radio) y enviaban datos sólo cuando necesitaban hacerlo. Si dos computadoras lo hacían al mismo tiempo, había una colisión, por lo que esperaban un tiempo (elegido al azar) para reenviar los datos. Eso traía algunos problemas, así que la rediseñé junto con David Boggs para que el tiempo de espera se basara en el tráfico que había en la red; así todo funcionaba mejor. Además, la Alohanet transmitía 4800 bit por segundo; con Ethernet llegábamos a 2,9 millones de bits por segundo. La primera red interna que hicimos se llamaba Alto Alohanet, pero como no queríamos quedarnos pegados ni a las ondas de radio ni al cable coaxial le pusimos Ethernet, que era más impreciso. En 1975 o 1976 nos dijeron que era un nombre muy nerd , y lo cambiamos a Xerox Wire. En 1979 lo quisimos estandarizar para licenciarlo comercialmente con DEC e Intel, y no les gustó mucho, porque no querían ponerle el nombre Xerox a algo que ellos fabricaban, así que volvimos a Ethernet. Al final fue un acierto, porque la idea es que la red es independiente del medio, por eso ahora se puede hablar de Ethernet inalámbrica.
El modelo de negocios.
- Tuvo buena aceptación la idea?.
-No, para nada. Desde el principio tuvimos mucha gente en contra; cuando publicamos el primer memo interno en Xerox, un físico del PARC dijo que nuestra idea era ridícula; después otro científico nos quiso copiar y hacer otra red, pero más convencional; tuvimos que ganarle en el mercado a IBM, que ponía todo el peso de su marca y tenía otro protocolo de conexión entre computadoras. Fue un trabajo muy arduo; uno tenía que estar dispuesto a ganarse enemigos, y a tener mucho coraje para enfrentarse a compañías enormes (General Motors también tenía su propio protocolo) para tratar de que Ethernet fuera un estándar.
-Pero lo lograron.
-Sí, porque mucha gente entendió las ventajas que había en tener un estándar de intercomunicación entre computadoras. Es lo que llamo el modelo de negocios de Ethernet: se parte de un estándar ratificado por un cuerpo colegiado (el IEEE o el ISO). Esos estándares son muy complicados de obtener, porque las asociaciones técnicas son como una legislatura, hay mucha burocracia y gente muy fea. Toma su tiempo (2 años en el caso de Ethernet), pero cuando lo lográs, tenés un estándar que es abierto, que está disponible para todo el mundo.
- Y qué se puede prever del futuro de las redes?.
-Video, literalmente. Nos vamos a pasar los próximos diez años actualizando la Internet para que pueda transportar video. Me refiero a la televisión, las videoconferencias, la venta de productos usando imágenes en movimiento, lo que sea. Va a estar en todos los rincones de la Red. Vamos a tener que actualizar los caños, las aplicaciones y los protocolos. No va a pasar de un día para el otro, pero va a ser genial.
Qué hizo Bob Metcalfe?.
En 1973 desarrolló el protocolo Ethernet, una tecnología para poner en red las computadoras personales.
Aunque se pensó para cable, hoy Ethernet es sinónimo de red sin importar el medio: hay, por ejemplo, redes Ethernet inalámbricas.
Prácticamente todo el tráfico de Internet pasa, en algún momento, por una placa de red que sigue las bases que Metcalfe fijó hace 30 años.