El 37 % manifestó que sus ventas, comparadas con el mismo mes del año anterior aumentaron, y un 18 % reportó descenso.
El balance de respuestas--opiniones buenas menos opiniones malas-- mejoró frente a los niveles de septiembre, pero está por debajo del registrado un año antes.
Los comerciantes anticiparon buena parte de las compras de mercancías que se venderán en la temporada de diciembre, en previsión a más aumentos de precios. Inclusive, varios empresarios del sector papelero ya tienen negociada la mercancía que se venderá en la temporada escolar de febrero.
Este comportamiento ha estimulado las ventas de los distribuidores mayoristas.
El reporte sugiere que en octubre las ventas de bienes durables como vehículos, repuestos, electrodomésticos, computadores y en general artículos de tecnología estuvieron flojas, aunque los comerciantes especializados destacaron buenas ventas de neveras y de aparatos de aire acondicionado, como reflejo del prolongado verano que sufre el país.
Las ventas de víveres y abarrotes tuvieron un comportamiento aceptable. Desde la frontera con Ecuador y con Venezuela se reportaron también ventas aceptables.
Una buena noticia es que mejoró la opinión de los comerciantes, especialmente de Bogotá, acerca del desempeño de sus negocios en el futuro inmediato, lo que bien podría denominarse el ‘efecto Peñalosa’.
El aumento en las tasas de referencia decretado por el Banco de la República el 30 de octubre, no tendrá para este año un efecto adverso para los consumidores, como quiera que las tasas de interés para créditos de consumo responden a una lógica distinta: se establecen trimestralmente de acuerdo a la Superfinanciera.