En imágenes grabadas por una cámara de seguridad de un edificio aledaño al local comercial, cercano a la avenida Lindsay y el sector de El Cable, oriente de la ciudad, se aprecia el momento en que un Policía, acompañado por otros agentes que llegaron a bordo de motocicletas de la institución, se monta en la bicicleta y se marcha.
Ese hecho sucedió en la noche de ese 3 de marzo, día en que en Manizales se desataron disturbios entre manifestantes y la Policía durante protestas en contra del nuevo sistema estratégico de transporte público de la ciudad.
Ese día, Julián Sepúlveda, alumno de ingeniería eléctrica de la Universidad Nacional de Colombia, sede Manizales, fue aprehendido por la Policía "porque participó en los desmanes", según la versión oficial, y su bicicleta la dejaron a guardar en el minimercado de un edificio.
El universitario, quien ese día fue conducido a la estación de la Policía en el barrio San José, y su familia negaron dicha versión y explicaron que el joven llegó a El Cable por casualidad y fue capturado cuando intentó marcharse y fue perseguido por unos agentes en motocicletas.
"La bicicleta la dejó en el minimercado un taxista al que alguien le pagó para llevarla allí. Él no le dijo a los trabajadores de éste quien lo contrató para eso y se fue", le contó a este medio, Rubén Darío Sepúlveda, padre del universitario.
A raíz del video, que fue colgado en la Internet, y de las denuncias realizadas por algunos medios de comunicación, la Policía inició una investigación disciplinaria interna, que con la aparición de la bicicleta podría ser archivada.
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