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Matthew Pearl acaba de publicar su libro 'El último Dickens'

El escritor neoyorquino continúa explorando el siglo XIX, que lo tiene obsesionado.

Redacción El Tiempo
La vida literaria del siglo XIX se convirtió en una especie de obsesión para el joven escritor neoyorquino Matthew Pearl (1975). Una extraña combinación de varios factores parece ser la causante de este embrujo, que lo ha llevado a dedicarle ya tres libros: El club Dante (2003), La sombra de Poe (2006) y El último Dickens, que por estos días llega a las librerías del país.
Desde su estudio en Boston (E.U.), Pearl le contó a EL TIEMPO que todo comenzó a los 15 años, cuando resultó cautivado con la lectura de las obras de Edgar Allan Poe, Charles Dickens, Herman Melville, William Faulkner y James Joyce, entre otros. "Al principio me sentía perdido en varias de las lecturas -dice-, pero la pasión por entenderlos, creo que me hizo un mejor lector".
A esta afición se sumó, luego, su traslado a esa antigua ciudad para estudiar literatura inglesa y norteamericana en la Universidad de Harvard.
De seguro, todo ese imaginario (misterioso, oscuro y victoriano) que traía en su mente desde la juventud se le hizo más vivo al llegar a la vieja capital del estado de Massachusetts, cuyo ambiente de corte londinense suele diferenciarse del prototipo común urbano estadounidense.
En medio de los jardines universitarios y de sus caminatas por Harvad Square, a pocas cuadras de la emblemática casa del poeta Henry Wadsworth Longfellow, Pearl dio vida a su primera novela, El Club Dante (2003), que lo catapultó a la fama, al superar el millón de ejemplares vendidos en inglés, y convertirlo en "la nueva estrella deslumbrante de la ficción literaria", como lo calificó su colega Dan Brown.
Las escenas de la novela, precisamente, se suceden en la Boston de 1865, en donde comienzan a ocurrir una serie de asesinatos brutales, inspirados en el infierno de Dante. Y son los miembros del denominado club Dante (grupo de poetas y profesores de Harvard -liderados por Longfellow-), quienes logran descubrir al asesino.
- El misterio parece ser otra de las fuerzas que lo inspira para escribir...
-Hay algo que nos hace despertar siempre en medio del misterio. Creo que él es el que nos inspira a la acción, bien sea como lectores o como escritores. Y eso nos ubica como partícipes y no solo como observadores.
El encanto de Dickens y Poe
Luego de su primer libro, que Pearl acepta haber escrito en un momento particular en el que luchaba por hacer de la literatura parte esencial de su vida, vinieron las novelas La sombra de Poe y El último Dickens, que le permitieron desmitificar, a través de la figura de la muerte, a esos seres entrañables cuya obra tanto le había impactado.
"A veces suele ser muy difícil reconciliar nuestra idealización por los clásicos de la literatura con el hecho de que ellos también fueron seres humanos como nosotros. Pero la muerte nos humaniza a todos, hasta a Dickens o a Poe. Y tal vez su muerte nos da la oportunidad de conocerlos mejor y pensar en ellos como un nuevo faro", explica el escritor.
Para lograrlo, apeló a esa pasión por recolectar datos curiosos de la historia de la literatura, que le han ayudado a atrapar la atención de lectores y alumnos, en las cátedras de literatura y escritura creativa que ha impartido en Harvard y en Emerson College.
"Confieso que escribo mis libros de una manera un tanto egoísta; pues son exactamente los libros que me gustaría encontrar en la estantería de una librería. Y creo que soy afortunado de contar con lectores que comparten los mismos intereses", agrega el autor, al hacer alusión a los dos grandes enigmas de la literatura que aborda en sus otras dos novelas.
En La sombra de Poe, el joven abogado Quentin Clark se da a la tarea de restituir la buena reputación del escritor Edgar Allan Poe, luego de ser enterrado en una tumba sin nombre, en 1849, en la ciudad de Baltimore (E.U.). Tanto la prensa como los mismos familiares atribuyeron, en su momento, el triste final del autor de El gato negro a su condición de borracho.
Por su parte, en su novela más reciente (El último Dickens), el escritor revive lo ocurrido con la famosa novela inconclusa de Charles Dickens (El misterio de Edwin Drood), luego de su muerte en 1870, cuando se encontraba en la cúspide de la fama y de su carrera literaria.
Este suceso desencadenó una serie de asesinatos y codicias de las editoriales de la época por apoderarse de los primeros seis capítulos que Dickens ya había sacado por entregas, para ser publicados en forma de libro. El autor había anunciado que la novela tendría 12 capítulos.
-¿Cuál es el encanto que le genera Dickens?
-Las novelas de Dickens te hacen sentir dentro de la historia, no importa quién seas o cuál sea tu condición. Creo que si lo hubiera conocido, habría tenido la misma sensación. Estar en un cuarto con Dickens te habría hecho sentir como la persona más importante en el mundo, incluso si esa sensación terminara en el momento en que él volteara la mirada.
- ¿Y el de Poe?
- Poe fue el tipo de escritor y persona que parecía llevarte con sus pensamientos a lugares a los que nunca podrías ir. Inspiraba curiosidad y se convertía en un desafío comprenderlo. Al mismo tiempo, él se sentía profundamente alienado por la mayor parte del mundo. Era una persona triste de muchas maneras.
A pesar de su rigurosa preparación, Pearl se considera un joven común y corriente. A primera vista, parecería ser un estudiante más de una maestría de derecho en Harvard, que en sus ratos libres se ofrece como voluntario en un refugio para animales sin hogar a los que intenta buscarles uno sustituto.
Aunque prefiere la música de finales de los 60 y principios de los 70 (The Beatles, Rolling Stones y Bob Dylan), les sigue el rastro a los de su generación. "A lo mejor algunos de mis seguidores se sorprenderán, pero también me encantan Shakira y Pink. Creo que cuentan buenas historias en sus canciones", confiesa.
En su novela más reciente, Pearl también hace un retrato de la sociedad de finales del siglo XIX, en la que, mientras la mujer hacía su tímido ingreso a la fuerza laboral y se revelaba contra el machismo, las editoriales se declaraban la guerra a muerte por apoderarse de las grandes firmas.
"Creo que la edición es un negocio de ritual y tradición. Y espero que la manera como lo retraté, dentro del siglo XIX, nos ayude a comprender que este es también un negocio de coraje y riesgo. Una lección para aplicar hacia el futuro, en el que tendremos que enfrentar los desafíos tecnológicos que se avecinan en el sector".
Y aunque el escritor estadounidense comentó que su próximo libro será el primero en el que no abordará algún enigma de la historia de la literatura, acepta que el fantasma del siglo XIX seguirá paseándose por sus páginas, pues la trama se desarrolla en la Boston de esa época.
"Luego de este libro, planeo escribir otros dos de la serie de El club Dante. Si en el primero abordé el infierno, siento que hay otros dos aspectos (el cielo y el purgatorio) de la vida después de la vida que me interesa explorar", concluye.
CARLOS RESTREPO
Cultura y Entretenimiento
Redacción El Tiempo
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