Matina Shakya sustituye en el puesto a la niña de 11 años, Pritee Shakya.
"Como la antigua 'kumari' tenía ya 11 años, un accidente podría haber ocurrido en cualquier momento", dijo Hem Raj Subedi, un funcionario del comité que se ocupa del mantenimiento de las niñas diosas de la capital nepalesa, el Guthi Sansthan.
Con la palabra "accidente", Subedi se refería a la posibilidad de que Pritee se hubiera desarrollado, ya que una de las condiciones de las "niñas diosas" es que estas no hayan alcanzado la pubertad.
Considerada una reencarnación de la diosa Taleju, la nueva 'kumari' será trasladada esta noche al templo de la deidad.
La niña diosa de Katmandú es considerada la protectora del país, tanto por la mayoría hindú como por la minoría budista, y el rey Gyanendra tenía por costumbre rendirle honores en septiembre, aunque el advenimiento de la República ha hecho que sea el Presidente quien tome el testigo de la ceremonia.
Con el fin de la monarquía, el Guthi Sansthan recibió la autoridad para dar el visto bueno a la 'kumari' elegida por el comité de cuatro sacerdotes y astrólogos.
Hasta ahora, era el sacerdote real quien poseía la prerrogativa para el nombramiento de la 'kumari', cuya tradición tiene 251 años de antigüedad.
El domingo, la nueva diosa viviente fue llevada al palacio presidencial para que el Presidente, Ram Baran Yadav, pudiera presentarle su respeto.
Esta es la segunda sustitución de una 'kumari' desde que cayó la monarquía nepalesa, el pasado mes de mayo.
El pasado 28 de septiembre, la pequeña de seis años Shreeya Bajracharya fue nombrada 'kumari' de la localidad de Bhaktapur, una de las tres viejas ciudades del valle de Katmandú.
La tercera 'kumari' vive en la ciudad de Patan.
KATMANDÚ (Efe)