Wilbur Ross prometió que sería estricto contra los países que no respetaran las reglas de juego, y no ha tardado ni una semana desde asumió el cargo de secretario de Comercio para actuar en consecuencia imponiendo la primera sanción contra una empresa de origen chino.
La administración que preside Donald Trump anunció una multa de 1.190 millones de dólares a la compañía de telecomunicaciones ZTE por vender tecnología a Irán y violar así los términos del embargo.
ZTE se dedica a la venta de teléfonos móviles y equipamiento. La reprimenda forma parte de una acción conjunta de los departamentos de Comercio, de Justicia y del Tesoro.
La firma china les pagará 890 millones tras admitir que exportó de manera directa o indirecta hacia Irán productos fabricados en EE. UU. Los envíos sin la licencia previa de las autoridades estadounidense se produjeron durante seis años.
A este monto inicial se sumarán otros 300 millones si ZTE no respeta los términos que le impone Washington, que incluyen la creación de una figura independiente que supervise sus operaciones durante un periodo de siete años.