Los derechos para los partidos políticos que se declaren en oposición a los gobiernos comenzaron a avanzar el martes en el Congreso con la aprobación, en primer debate, del estatuto que les da garantías.
En menos de cinco horas, las comisiones primeras de Senado y Cámara le dieron su visto bueno al llamado estatuto de la oposición. Aunque no es la primera vez que el Congreso tramita un proyecto de esta naturaleza, en esta ocasión se trata de un mandato del acuerdo de paz que firmaron el Gobierno y las Farc.
El ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, resaltó que el proyecto de ley fue el “fruto” del trabajo y la “concertación” con todos los partidos, “excepto el Centro Democrático (principal opositor al Gobierno)”.
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El ministro Cristo hizo énfasis en que ese partido fue invitado infructuosamente a las 18 sesiones en las que se elaboró el estatuto con el resto de los movimientos y colectividades presentes.
Este contempla el derecho de réplica para los partidos de oposición en tres casos: luego de la instalación del Congreso, tras las alocuciones presidenciales y frente a “tergiversaciones” o “ataques” de funcionarios públicos, incluido el Presidente. Según lo aprobado, el derecho de réplica se ejercerá en los medios de comunicación del Estado y en los que “usan el espectro electromagnético”, como la televisión.
Esto ha generado preocupación entre algunos directores de medios y defensores de la libertad de prensa, que consideran que los medios electrónicos pueden terminar convertidos en el escenario de confrontaciones políticas y que la obligación de ceder espacios va contra la autonomía periodística.
Estas preocupaciones fueron manifestadas de manera pública, pero el no tuvieron discusión en el Congreso, donde el proyecto de ley pasó ayer sin tropiezos.
Curules aseguradas
El estatuto de la oposición, que comenzó su trámite en el Congreso, también contempla que el candidato a la presidencia que quede en segundo lugar acceda a una curul en el Senado y su fórmula vicepresidencial, a una en la Cámara. Ambos tendrán escaño también en las comisiones primeras de ambas corporaciones.
Adicionalmente, los partidos de oposición dispondrán de una “partida adicional” equivalente “al cinco por ciento del monto del financiamiento del funcionamiento permanente de los partidos y movimientos políticos”.
El proyecto pasa a debate final en las plenarias de Senado y Cámara, de manera separada, dentro de unas dos semanas.
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